Un partido ingrato tuvo este sábado Alexis Sánchez. Es que el goleador histórico de la Selección Chilena pudo matricularse con su primera conquista en su retorno al Inter de Milán, pero debió lamentar la anulación del tanto.
El delantero nacional comenzó desde la banca el encuentro en el que los neroazzurro debieron conformarse con un mezquino empate 2-2 ante el Bologna en casa, luego de estar en ventaja por 2-0 con goles de Franceso Acerbi (11′) y Lautaro Martínez (13′).
Sin embargo, el ex cuadro de Gary Medel reaccionó con tantos de Riccardo Orsolini (penal, 19′) y Joshua Zirkzee (52′), lo que motivó que el entrenador Simone Inzaghi decidiera una triple sustitución, incluido el ingreso del ariete de la Roja por Marcus Thuram en el 55′.
Y el tocopillano bien pudo vivir un momento de gloria cuando apenas llevaba cinco minutos en el terreno de juego al anotar el que era la ventaja parcial de su elenco; no obstante, el juez asistente anuló la diana del atacante por fuera de juego, decisión confirmada más tarde por el VAR.
De ahí en más el chileno no logró gravitar mayormente en el trámite del cotejo, lo que fue ampliamente criticado por la prensa italiana.
En ese sentido La Gazzetta dello Sport fue lapidaria con el accionar del delantero: “Muchos giros, mucho frenesí, pero al final, cuando tiene que apuntar, el hombre nunca lo hace”, disparó.
En tanto Corriere della Sera hizo hincapié en el gol anulado, consignando que “marcó fuera de juego, dando la ilusión de estar listo para dejar huella pero no fue así”.
Por su parte Calcio Mercato fue un poco más benevolente con Sánchez, al señalar que éste “fue propositivo, sostuvo casi todos los balones saliendo de las garras de los defensores adversarios, pero sin crear nunca peligro hacia la portería rival”.
Por lo pronto, los próximos desafíos para el bicampeón de América en 2015 y 2016 serán con la Roja, primero frente a Perú (local) y Venezuela (visita) por la tercera y cuarta fecha, respectivamente, de las Eliminatorias Sudamericanas.