Nadal derriba a Kyrgios en un dura batalla

Rafael Nadal (2°) dejó en el camino a un complejo escollo en su paso por Wimbledon, el australiano Nick Kyrgios (43°) en la segunda ronda, uno de los mayores talentos del circuito y probablemente el más irreverente y controvertido. En la previa, el oceánico había dicho que no se tomaría una cerveza con Rafa, porque no lo conocía tanto. Sin duda que se anticipaba una dura batalla.

El espectáculo estaba garantizado. Ninguno de los dos defraudó, aunque Rafa hizo pesar su mayor estabilidad para superar a su rival por 6-3, 3-6, 7-6 (5) y 7-6 (3), en tres horas y cuatro minutos, en eun encuentro que tuvo de todo. Desde Kyrgios reclamándole al árbitro por el tiempo que perdía esperando que Nadal se acomodara (lo que le valió un warning por insultos), hasta los gritos desaforados del manacorí.

De los 29 aces que logró el australiano, uno de ellos fue sacando por abajo. Además, ensayó tiros extravagantes y le gritó con furia los puntos a su adversario, quien también le respondió. Finalmente, errores no forzados de Kyrgios le impidieron tener mejor suerte. Un bramido de desahogo ratificó la dureza que fue el duelo para el mallorquín. El público, en tanto, reconoció con una ovación el trabajo del tenista perdedor.

"Ha sido una victoria importante para mí y el resto de cosas...", dijo Nadal, quien valoró lo que hizo el oceánico. "Puede jugar increíblemente bien, he vencido a un rival duro. Cuando quiere competir bien, es uno de los rivales más duros a los que quizás puedas enfrentarte", expresó. "Normalmente contra mí y contra los mejores, quiere esforzarse y cuando lo hace, es muy duro", añadió.

Más tarde, Rafa fue consultado por el pelotazo al cuerpo que le lanzó su rival. "Según mi ética, no es correcto, pero a lo mejor según la suya sí lo es. Sigo pensando lo mismo. No creo que sea un mal chico, creo que ha perdido un poquito el camino y reconducirlo sería bueno para su carrera", expresó. Mientras que Kyrgios se justificó: "¿Por qué debería disculparme? ¿Lo golpeé? Le dio con la raqueta, gané el punto. No me importa. No tengo por qué disculparme". E insistió en esta idea. "¿Cuántos grand slams tiene? ¿Cuánto dinero tiene en el banco? Puede soportar un pelotazo en el pecho. Sí, quise pegarle. Y gané el punto".

Además, explicó su irregular presente. "No tengo entrenador. No entreno suficiente. No voy suficiente al gimnasio, pero salgo ahí y le compito a los mejores del mundo", argumentó.

El próximo rival de Nadal será el francés Jo-Wilfried Tsonga (72°). Mientras que Roger Federer (3°) tuvo una tranquila faena, derrotando al británico Jay Clarke (152°), por 6-1, 7-6 (3) y 6-2. Ahora enfrentará al francés Lucas Pouille (28°).