Una aplanadora. El número uno del mundo, Rafael Nadal, fue una verdadera máquina y nuevamente se coronó campeón en Conde de Godó, levantando así su undécimo título en Barcelona. La victima fue el griego de 19 años Stefanos Tsitsipas (63°).

El trámite del partido fue simple para el mejor del mundo. Al igual que en todo el torneo y lo sucedido la semana pasada en el Masters de Montecarlo, no cedió ningún set. Fue por parciales de 6-2 y 6-1 en un poco más de una hora.

Con esta victoria, Nadal alcanza la espectacular marca de 46 sets sin perder en arcilla y registró su triunfo 401 en la superficie. Está imparable y con la vista fija en Roland Garros.