El domingo, en un solitario estadio Santa Laura, Universidad Católica volvió a saber lo que se siente ganar. No dio para festejos exacerbados; sin embargo, era una victoria necesaria, después del feo tropezón en el Clásico Universitario. El triunfo de 2-0 sobre Santiago Wanderers le permitió avanzar a las semifinales de la Zona Centro Norte de la Copa Chile. Planteado de otra manera, no se tachó la competencia en la lista de objetivos de los cruzados para 2023. Al tratarse de una ventana para entrar en un certamen internacional, y después de despedirse prematuramente de la Sudamericana, en la precordillera no la descuidan.
En el segundo tiempo, ingresó al campo Fernando Zampedri. Pese a que no estaba contemplada su presencia ante los porteños, el Toro igual estuvo. Entró en los 77 minutos, en reemplazo del Sub 21 Bryan González, uno que se vio bien ante los caturros. Fue su retorno a las canchas después de la operación a la que fue sometido, al finalizar la primera rueda del campeonato de Primera División.
El 30 de mayo, el argentino se sometió a un procedimiento quirúrgico para corregir una exostosis de calcáneo del talón derecho. En ese entonces, Cruzados informó que “la cirugía se desarrolló exitosamente y sin contratiempos”, en una de las clínicas de la Red de Salud UC-Christus.
¿En qué consiste la lesión? Es una inflamación crónica en el hueso que se dio por el roce del calzado que utiliza durante los partidos, una situación que es común en el fútbol. De hecho, para los últimos partidos de la primera parte del año, el ex Rosario Central tuvo que usar un zapato con un orificio, para así evitar la fricción con la zona afectada.
Luego de la intervención, venía la puesta a punto de Fernando Zampedri, la que todavía no está concluida. Originalmente, le restan dos semanas más para quedar a disposición del cuerpo técnico. O sea, la planificación era estar para el partido ante Curicó Unido, en La Granja, correspondiente a la fecha 17 del torneo local (el fin de semana del 16 de julio). Sin embargo, estuvo antes. Más bien, quiso estar antes. El tres veces goleador consecutivo de Primera División optó por apoyar a sus compañeros desde adentro, en medio del discreto presente futbolístico de la UC.
“El viernes no tenía ni una posibilidad de jugar y el sábado me puse los zapatos, intenté patear y quería sumar. Necesitaba estar ahí, en este momento del grupo”, confesó Zampedri en TNT Sports, después del duelo con Wanderers. Aunque no estaba para jugar, entró en la citación y participó del partido, partiendo en la banca.
“En la semana sufrimos un golpe que nos dolió mucho y ahora tenemos que estar unidos y tirar todos para adelante. Y tenemos mucha sed de revancha, porque queremos conseguir los objetivos”, añadió el delantero argentino.
Más allá del interés colectivo que significa apurar su recuperación en pos del equipo, Zampedri también tiene el afán de seguir rompiendo marcas con la camiseta cruzada. En el Torneo Nacional 2023, que se reanuda el próximo jueves, es uno de los goleadores con nueve tantos, junto a Leandro Garate, de Unión Española. Además, el Toro quiere el premio gordo: ser el máximo artillero de la Católica. Está en el séptimo puesto del ranking, con 94 tantos, a dos del sexto, Milovan Mirosevic. El número uno le corresponde a Rodrigo Barrera, con 118 anotaciones.
El Toro, a estas alturas convertido en un ídolo para la UC, también se refirió a la molestia de los hinchas y al cartel que les colgaron en las afueras de San Carlos de Apoquindo. “El hincha se manifiesta y es entendible. El partido anterior nos dolió mucho, igual que a ellos. Tenemos sed de revancha de ese partido y para conseguir otro título”, advirtió.