A fines de febrero, Neymar sufrió una lesión que generó inquietud respecto de su presencia en el Mundial. El astro del París Saint Germain sufrió un esguince en el ligamento anterior externo del tobillo derecho con la existencia asociada de una fisura del quinto metatarsiano. Brasil entero quedó en vilo.
A un mes y medio de la dolencia, es el propio delantero quien lleva la calma a su país. "Falta un mes, pero estoy progresando. Se está consolidando bien. Estamos todos conformes", declara en un adelanto de la entrevista que le realizó O Globo, que será emitido este sábado.