Nicolás Núñez inicia su gestión en Universidad Católica. Lo hace flanqueado por Juan Tagle y José María Buljubasich, las máximas referencia del club en materia de autoridad y con la confianza absoluta de que podrá revertir el actual panorama cruzado y enrielar al equipo en la disputa por el título. Lo avalan, también, un exitoso paso por Magallanes y su formación en los estudiantiles. Durante toda la conferencia de presentación, se reforzarán esos conceptos.
“Son días noticiosos en Católica, pero esta es una jornada de emoción y alegría. Pudimos avanzar rápidamente en la contratación de un nuevo técnico. Llegamos a un acuerdo el lunes con Ariel y empezamos a trabajar. A Nicolás lo teníamos a la vista hace tiempo. Sabíamos que nuestros destinos se iban a cruzar. Llámenlo el destino o la divina providencia. El viernes el directorio tomó la decisión. Un año y medio. Nico llegó a este club a los 12 años. Fue campeón, capitán, jugó en Europa. Seguimos con atención y cariño su carrera. Como persona está muy identificado con Católica. Por su manera de trabajar, de relacionarse con los planteles, con los medios. Por el interés que Nicolás también tenía, fue una negociación muy rápida. Nico, te damos la bienvenida a tu casa. Vas a contar siempre con el apoyo, sabiendo que los resultados te presionan semana a semana”, dice Tagle, a modo de bienvenida. “Queremos retomar los años de éxito que hemos tenido, sabiendo que hay que ir pasito a pasito, partido a partido. Nicolás ha demostrado en cancha lo que le puede sacar a los equipos que tuvo. Estamos contentos e ilusionados. Le deseamos lo mejor”, complementa el Tati.
Cautela
Núñez se ve seguro, pero cauteloso. Y, sobre todo agradecido. “Por confiar en mí y tener la valentía de creer en un técnico joven. Sé que identifico a este club. Quiero manifestar mi ilusión. Era importante en mis inicios como técnico estar acá. Estoy feliz de estar en el lugar donde crecí. Muchos de mis pensamientos los puedo potenciar con este grupo de jugadores que me va a tocar liderar”, establece de entrada.
Habla, también, de lo que espera de sus nuevos dirigidos. “Creo que el punto de partida de cualquier forma de jugar o de cualquier líder es generar el compromiso. Mi impresión al día de hoy, en lo que compartí con los jugadores, veo mucha ilusión. El triunfo del fin de semana ayuda. Estoy muy dispuesto a trabajar en una idea. En ese proceso vamos a estar en estos días. El contexto ayuda mucho. Es gente con la que convivo hace 15 años. Ayuda a que el proceso de adaptación dure menos. Confío en los jugadores. Que quieren seguir siendo competitivos”, plantea, en el inicio de su hoja de ruta en la precordillera.
Núñez asume las exigencias que enfrentará. “Es la dinámica. Cuando decidí ser técnico, supe que los resultados eran lo primordial. Hay pocos días, pero el domingo el equipo fue competitivo. Siento que hay que ajustar pequeños detalles, pero se avanzó muchísimo. En eso valoro lo que hizo Rodrigo y lo que hizo Ariel. Si bien fue irregular, ellos ya tenían una idea. Es una oportunidad. No vamos más allá del partido del fin de semana, que va a ser importante”, dice. En ese contexto, resalta la actitud del club al elegirle. “Siento agradecimiento por estar en este lugar. Admiro la valentía del club por creer en mí, formado en casa y joven. Ser el técnico de la UC conlleva mucha responsabilidad. Con un equipo de trabajo, un club que va a potenciar mi manera de ver el juego”, sostiene.
Más adelante, eso sí, se muestra cauteloso a la hora de definir metas específicas. “Objetivos no hemos querido perder energía en mirar. Elevar el rendimiento y ajustar algunas cosas para seguir siendo competitivos. No hay ningún equipo tan alejado en la tabla, entonces siento que perder energía pensando en fin de año solo nos va a restar fuerzas. Si ellos confiaron en mí un año y medio habla de que confían en que podemos desarrollar bien el proyecto”, insiste.
“Lo primero es que cuando asumo este desafío sé que tengo este plantel y ningún refuerzo confirmado y estoy muy contento. Creo que podemos ser muy competitivos con lo que hay. Me siento seguro con lo que hay en el plantel y haremos todos los esfuerzos por potenciarlo, pero tampoco es algo que se me prometió. Estoy muy contento”, dice, después, respecto de la posibilidad de fichar algún refuerzo. La dirigencia dice que lo está intentando.
“La dinámica del fútbol cambia. Espero que estemos para ser competitivos el sábado. Lo cierto es que vamos a competir con un rival que es puntero”, refuerza, respecto de sus planes más urgentes.
Flexibilidad
Núñez dice que será flexible en su propuesta. “Más que un sistema táctico, lo importante son los roles y funciones y unos principios que he tratado de incorporar. Mandar a través del balón. La figura táctica son números. Eso lo va a ir determinando la estrategia y el plan de juego. No soy de tener uno tajantemente y aferrarme a eso”, sostiene.
También habla de alguno de los valores a los que pretende sacarles partido. “Pienso y espero que mi trabajo potencie a Aravena y Montes. Pienso mucho en esos jugadores que dan amplitud, verticalidad, peligro, que nos ayudan a atacar mejor. Darles contextos. Están Tapia, Cuevas también por banda. Me siento privilegiados de tenerlos en el plantel”, amplía.
Y rescata algunas lecciones de su reciente paso por Europa, donde aprovechó de visitar a grandes entrenadores, como Josep Guardiola y Manuel Pellegrini. Ya aprovecha de rayar la cancha. “Tuve el privilegio de alcanzar la última parte de la temporada. Rescato el liderazgo, el compromiso. Todas las formas han conseguido logros. Le doy mucho valor a ese aspecto. A la cercanía, pero con los límites claros. Las decisiones pasarán por mí. Ese es mi rol. Rescato mucho eso, sobre todo de Pellegrini, que me remarcó mucho eso”, cuenta.
Además, valora el rol formador del club. “Históricamente su política ha sido formar jugadores. Está a la vista. Los jugadores formados en casa son muchos. En Magallanes me encontré una similitud. Lo valoré cuando joven. Tuve espacio y me pude desarrollar. Los jugadores tendrán cabida por su rendimiento, pero la política está clara. Hay buena comunicación con Rodrigo (Valenzuela), con Diego Rosende. Las relaciones humanas van a ayudar a ir fluyendo”, precisa.
Finalmente, se asume como parte de una generación de técnicos chilenos que se abren paso. “Estoy feliz de que hayan pensado en un técnico como yo. Si puedo representar a una camada, como Córdova, Salas, García… Siento que nos hemos ido ganando un espacio, con preparación, resultados. Si esto va a abrir puertas, me pone feliz, pero no asumo bien esa responsabilidad, pero mi posición habla por si sola. Eso me tiene muy feliz”, sentencia.