Arrollador. Así fue el inicio de Joaquín Niemann (26°) contra Patrick Reed (7°), el cabeza del serie del Grupo 7 del WGC-Dell Technologies Match Play 2021. En los cinco primeros hoyos, sacó cinco pasos de ventaja sobre su rival y desde cimentó su primera victoria en este torneo reúne a 64 de los mejores golfistas del planeta. Con eso, sumó 2 puntos en su zona y quedó empatado con Bubba Watson (55°), quien dio cuenta del sudafricano Christiaan Bezuidenhout (33°).
La victoria de ambos jugadores obligó a un playoff para dirimir el clasificado a octavos de final. Una instancia que según las reglas se disputaba hoyo por hoyo, desde el 1 hasta el 18 y hasta que uno venza al otro en una bandera. En esa senda, el estadounidense salió airoso. Y de una manera todavía más dolorosa para el chileno, porque después de que su rival conquistó un par la bandera dos, él falló el suyo, a metro y medio de la meta.
Sensación de tristeza para el mejor golfista nacional de la historia. Porque tanto el miércoles como el jueves (justamente ante Watson en su segundo partido) tuvo el triunfo casi en el bolsillo. Sus adversarios le arrebataron esos puntos que hoy lo tendrían en octavos de final del campeonato.
Brillante triunfo al inicio
Un triunfo con doble valor ante Reed en el primer turno. Porque Joaco debía levantarse de dos empates dolorosos de las primeras rondas, ambos definidos en la bandera 18, cuando parecía que la victoria del nacional estaba en sus manos. Y lo hizo con maestría: vapuleando a uno de los jugadores más condecorados del PGA Tour, dueño de nueve títulos, incluyendo el Masters de Augusta de 2018.
Si bien en la modalidad Match Play se puntúa por hoyo ganado y no por golpes, es bueno recorrer lo que hizo Niemann en su tercera ronda: cinco birdies (en las banderas 2, 3, 5, 10 y 11) y ningún bogey hasta el 12. Además se impuso en los greens del 1 (par 4) y 4 (par 3). El estadounidense partió desenfocado, pues cometió varios errores que le costaron golpes de castigo.
Reed insinuó un repunte ganando en los hoyos 7 y 9, con dos birdies. El talagantino, sin embargo, a diferencia de los dos primeros días, no dejó escapar esta victoria. Ni siquiera el punto de su rival en el 12 lo desestabilizó. El chileno mantuvo la calma y el pulso, dando el golpe final con su minitriunfo en el hueco 13. Ni siquiera fue necesario que el duelo se completara en 18 paradas, puesto que la ventaja del especialista criollo era tan amplia que todo se acabó en el 14, puesto que la diferencia ya era inabordable.