Joaquín Niemann sigue inspirado en Hawai. El jueves tuvo un inicio brillante en el Sony Open, donde entregó una de las mejores tarjetas de su carrera al terminar el día con 62 golpes (-8), por lo que las expectativas eran altas sobre lo que pudiera realizar en la segunda jornada.
Y a pesar de que no repitió la brillante producción del debut y perdió la punta, igualmente logró una tarjeta de 69 tiros (-1), que le permite estar en la discusión por el título, a falta de dos jornadas.
Esta vez, el talagantino comenzó desde los segundos nueve hoyos del Waialae Country Club, justamente la zona en la que había mostrado su mejor repertorio en la jornada anterior. Sin embargo, careció de precisión y su trabajo con el putt fue menos efectivo que el jueves, pero igualmente consiguió un par de birdies en el hoyo 16 y en el 18, que le dieron cierto aire para enfrentar el resto de la vuelta.
Para la mitad final del recorrido, Niemann estuvo certero para salvar el par. No obstante, en la tercera bandera hizo un bogey al realizar cinco tiros, un sobre el par, perdiendo la punta.
En los siguientes seis hoyos se mantuvo sin mayores contratiempos, pero no pudo marcar diferencias ni tampoco aprovechó las paradas de par 5, como la novena.
De todos modos, la jornada para el actual número 31 del mundo fue bastante correcta. No se alejó de la vanguardia y llega con la ilusión de conseguir en Hawai el segundo título del PGA en su corta carrera. Solo depende de él y de la madurez que ha ido mostrando semana a semana en el circuito.