Sabor amargo para Joaco tras la tercera ronda del Travelers Championship. El chileno comenzó con buenas sensaciones, pero poco a poco se fue diluyendo. En el 17 clavó un doble bogey que lo deja casi sin opciones del título y con un -2 en la general. Mañana tendrá la última oportunidad para recuperar sensaciones, y tratar de volver a los puestos que perdió luego de un sábado para el olvido.

Pese a que en el arranque no pudo vencer al TPC River Highlands, Joaco entregaba buenas sensaciones. Estuvo cerca del birdie en varios momentos de su juego y la tabla no se movía mucho en esos momentos del turno matutino. Recién en el ocho llegó el primer descuento del día, uno que fue derechamente extraordinario.

Aprovechó un hoyo corto como el octavo (163 metros) para clavar un gran golpe de salida, que lo dejó bien metido en el green. Ahí, lo separaban casi 12 metros de la bandera, pero Joaco sacó su mejor versión. El putt entró de primeras y Niemann celebró.

Siempre deslumbró en los tramos de pocos metros, ya que en el 11 (129 m) también aprovechó el par tres y metió un tiro de salida que quedó a un metro del hoyo. El segundo golpe fue de mera obligación porque ya todos sabían que había un nuevo birdie para Joaco.

Pero no todo fue alegría. En el hoyo nueve cayó al búnker desde el drive y le costó otro tiro poder volver al fairway. Finalmente las malas sensaciones se confirmaron cuando falló un putt a menos de un metro.

Después en el 13 el agua lo castigó cuando se llevó su primer pelota. Intentó reponerse de ese golpe inicial, pero no pudo. Su segundo bogey de la jornada complicaba el plan del chileno, quien llegaba a los últimos hoyos arriba pero sin mucho margen. Más de 40 jugadores estaban entre el -4 y la cima.

La esperanza era que volviese a sorprender en el cierre, tal como venía haciendo los días anteriores. Pero no fue el caso. Joaco mantuvo la exigencia del campo en tres hoyos, pero en el 17 tuvo su peor momento del día. La laguna de la penúltima bandera lo castigó y luego el green terminó de transformar la pasada en pesadilla. Un doble bogey que lo bajaba muchos puestos y que dejaba sus opciones de título en un imposible.

El remate fue en el 18 con otro bogey. +3 en el día y -2 en la general. Lo logrado para superar el corte se diluye tras una jornada donde no pudo dar con sus mejores versiones y donde siempre que brilló, el campo lo castigó de vuelta. El domingo buscará la remontada para volver a los puestos altos.

La tarjeta de Niemann:

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