Cuatro días después del transplante de pulmón, al que fue sometido de urgencia, Niki Lauda se encuentra en un estado "muy satisfactorio", según informó el hospital general de Viena, donde está internado. El tres veces campeón de Fórmula 1 había sufrido una infección, pero ya se encuentra en recuperación.

"Veinticuatro horas después de la cirugía, Lauda estaba plenamente consciente. Pudo ser desentubado y respira sin asistencia", se lee en un comunicado del hospital. "Durante los días siguientes su condición mejoró constantemente y todos los órganos están funcionando bien", continúa.

Los gases venenosos inhalados durante su célebre accidente en el Gran Premio de Alemania de 1976, cuando los socorristas tardaron casi un minuto en sacarlo de su automóvil en llamas, han causado un proceso de disminución constante de la fuerza de sus pulmones.

Aunque despertó del coma inducido producto de la operación, Lauda aún no abandonará el hospital, continuando con su recuperación en las próximas semanas.