Las tres derrotas consecutivas que sufrió Universidad de Chile aumentaron la tensión en el Centro Deportivo Azul. Y si bien, el gerente deportivo -Manuel Mayo- y el director técnico -Mauricio Pellegrino- no están peleados, hoy sí presentan profundas diferencias.
La primera de ellas se produjo por la política que adoptó el ejecutivo de Azul Azul en el último mercado de pases. El adiestrador deseaba reforzar varios puestos, pero la concesionaria laica sólo trajo a un lateral izquierdo, que no destacaba por su buen presente. “Sin duda los problemas que ha tenido Vicente Fernández con su lesión han facilitado su llegada. La verdad, si él hubiese estado jugando sería imposible traerlo”, desnudó el técnico argentino en rueda de prensa.
Luego insistió en lanzar dardos, cuando aseguró que el “tema de los fichajes es un tema relevante y es un aspecto en el que tenemos que evolucionar en todos los estamentos de la institución para mejorar el equipo”.
Pero eso no es lo que piensa su jefe. Mayo insiste en que había “un presupuesto acotado” para reforzar el plantel y que, pese a ello, formaron un equipo competitivo. “Me tocó estar acá y dije que lo que analizábamos era que nos faltaba un jugador para completar un plantel con dos jugadores por posición. Creo que la competencia siempre es buena. Si juega uno, sabe que no se puede relajar. Hoy lo mantengo, tuvimos una mala racha, pero estoy seguro de que tanto Mauricio como sus jugadores tienen las herramientas para salir de esta mala racha”, aseveró en la presentación del lateral izquierdo.
Por ahora, no habrá renovación
Mayo y Pellegrino también presentan dicotomías a la hora de hablar de los objetivos que se tienen para este año. El funcionario de la sociedad anónima estudiantil tiene claro que Universidad de Chile debe pelear el campeonato hasta la última fecha.
“Competir por lo máximo que nos permita el campeonato, estar en las posiciones de avanzada, si nos sirve para salir campeón, está bien, si no, tendremos que estar cerca de eso, la exigencia en la U siempre es lo máximo”, lo dejó claro Mayo.
Mientras que el estratega le baja el perfil a la obtención de la corona, porque “una cosa es lo que se desea y otra es el objetivo” y la meta para él es llegar lo más arriba posible para que el 2024 sea más fácil pelear la copa. “Como salgamos a final de año, en la posición que sea, no me caben dudas que la U va a estar mucho mejor preparada para largar la próxima temporada. Ese es uno de mis objetivos primordiales”, detalló.
Quizás por lo mismo, ambas partes no se han sentado aún a conversar de una posible extensión de contrato. El vínculo de Pellegrino con la entidad estudiantil termina a fin de año y si bien Mayo ya inició las negociaciones con los jugadores que están en la misma situación que el DT, al estratega no le ha dicho nada.
“Con Mauricio (no he hablado, porque) no es el momento. No puedo decir nada ahora, porque falta mucho. Con los técnicos, al final, hay que ver qué quieren, qué quiere el club y estamos recién a mitad de año”, intentó desviar el tema Mayo. Aunque se dio cuenta de su equivocación e intentó suavizar sus palabras: “Con el técnico tendremos que conversar más adelante y ver que se dará. Pero hablar ahora, sería erróneo de mi parte”.
¿Qué dice Pellegrino sobre esto? “Estoy acá hoy y ya es mucho para mí y pronunciarme de aquí al año que viene es como hablar de supuestos fichajes”, es la ironía que usó cuando le preguntaron por el tema. Es que si bien no hay un quiebre definitivo entre ambos, claramente la relación no pasa por su mejor momento.