“No había chance de arreglar el quilombo”: Kun Agüero barre con Jorge Sampaoli al recordar el Mundial de Rusia 2018
El delantero argentino destrozó el paso del casildense por el banco de la Albiceleste. "No se podía cambiar el entrenador", agregó.
Argentina sigue disfrutando de la obtención de la Copa del Mundo de Qatar 2022. Sin embargo, aún permanece latente la mala experiencia que arrastraron en el Mundial de Rusia 2018 que fue comandada por el técnico Jorge Sampaoli.
Si bien con el extécnico de la Roja pudieron clasificar al torneo, el desarrollo de la Copa estuvo muy lejos de las expectativas creadas, tal como lo ha señalado Sergio Agüero.
“Fue un quilombo, la hacemos corta. Todos saben lo que pasó, fue todo un quilombo. Es difícil porque uno en Argentina quiere ganar, pero la realidad es que estaba todo complicado en Rusia, en todo sentido”, comenzó diciendo en conversación con Juan Pablo Varsky en el programa “Clank!”.
Luego, consultado sobre si se podían solucionar las diferencias en aquel momento dentro del vestuario, el exdelantero fue tajante. “No había chance de arreglar el quilombo ahí, no se podía cambiar el entrenador, ni los jugadores. Era esperar que diera la alineación, sin comunicación ni ideas, jugar a lo que nosotros sabemos y ordenarnos adentro de la cancha”.
Debido a esto, postuló que el fracaso de la selección argentina en Rusia era algo que estaba destinado a pasar. “Capaz que si pasábamos a Francia quedábamos afuera en la siguiente instancia, estaba destinado. Si te fijabas nuestras caras, en otros mundiales se veía una tristeza, pero en este eran caras de ‘esto iba a pasar’, estábamos calientes, pero sabíamos que iba a pasar. Se terminó todo y lo próximo era que la AFA empezara a encaminar de la mejor manera para el siguiente mundial. Era un milagro si llegábamos a la semifinal o a la final, ¿qué querés? ¿que sea careta u honesto? Hay que decir la verdad. Estábamos para el culo”.
Otro de los temas tratados por Agüero fue su problema en el corazón que lo obligó a tomar la decisión de dejar la actividad competitiva. “No fue un dolor. Sentía una sensación como que me estaba ahogando con mucha presión en la cabeza y pensaba que era porque volvía a jugar después de la lesión. Era mi tercer partido, pensé que estaba mal físicamente, me estaba cansando, que no podía más y me faltaba el aire, me ahogaba. Cuando miré al arco de mi equipo empecé a marearme y sentía que me iba a desmayar”.
“Quería decir algo y no me salían las palabras, le agarré la mano al capitán del Alavés para que frenara el partido. Cuando para, siento que me baja esa presión y me empieza a latir el corazón más rápido. El médico me dijo que me tranquilizara, que ya iba a parar. Me dijeron que no podía seguir jugando y me llevaron al hospital, ahí pensé que era más grave. Estuve cuatro días internado. Me empecé a preocupar y me puse nervioso. En dos meses me dijeron que no podía seguir jugando, que era imposible”, narró.
Debido a esto, tampoco pudo participar de Qatar 2022. “Ir al Mundial es el sueño de todos, pero me había sacado esa espina tras haber ganado la Copa América. Estaba aliviado, porque al menos me fui con algo. Me sentía parte de estar con ellos en el Mundial y quería que les vaya bien porque sentía que si no me pasaba lo del corazón capaz iba a estar con los chicos. Los conozco a todos y sentía que si ellos ganaban, yo también. Estaba nervioso porque desde afuera se vive así, pero tranquilo porque me había ido de la Selección con la Copa América”, expuso.
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