Universidad Católica está en pleno periodo de decisiones. Ayer anunció la llegada de Franco Di Santo como su gran carta para la delantera en la próxima temporada. Sin embargo, hoy informó de la rescisión de contrato de Fabián Orellana, excompañero del transandino en sus inicios en Audax Italiano. El mundialista, que tenía contrato hasta diciembre de 2023, nunca pudo consolidarse en su paso por la precordillera y ahora deberá buscar equipo. Así, se transformó en el primer cortado de Ariel Holan para la próxima temporada.
“En este momento de mi vida decido priorizar otros proyectos familiares y profesionales y liberar al club terminando nuestro contrato”, expresó el jugador de 36 años, en declaraciones al sitio oficial de la institución.
“Ha sido un honor representar a Universidad Católica. Siempre he intentado dar lo mejor para el club y siempre estaré agradecido por el apoyo que he recibido”, añadió el extremo, quien recaló en la UC en septiembre de 2021 tras 12 años en el fútbol europeo, y luego de que Colo Colo desechara su fichaje tras una votación del directorio de Blanco y Negro.
Fue parte del plantel que ganó el título del tetracampeonato y la Supercopa. No obstante, su aporte fue discreto, ya que en 31 partidos (la mayoría entrando como suplente) entregó apenas dos asistencias y no convirtió. Además, tuvo problemas con Cristian Paolucci, quien lo borró en el comienzo de esta temporada y solo con Ariel Holan tuvo algo más de minutos, pero muy lejos del nivel que alguna vez mostró en su paso por el Viejo Continente.
Su último partido fue en la eliminación ante Universidad de Chile por la Copa Chile, donde resultaría expulsado por lanzarle un pelotazo a Emanuel Ojeda, aunque luego se dirigió al camarín azul para ofrecerle disculpas al transandino.
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