Era la gran atracción del ATP de Belgrado. En Serbia, el número uno del mundo jugaba de local y como ya es tradición en cualquier torneo que dispute, de favorito. Pero su semana terminó antes de lo previsto. Novak Djokovic (1°) quedó eliminado en las semifinales al perder por 5-7, 6-4 y 4-6 ante Aslan Karatsev (28°), en un partido que se prolongó por tres horas y 25 minutos.
Otro golpe para Nole, quien desde que levantó su Grand Slam número 18 en Australia, no ha podido volver a festejar. Las molestias que lo acompañaron durante toda su travesía en Melbourne lo obligaron a restarse del Masters 1000 de Miami y recién apareció en Montecarlo, donde perdió en octavos de final ante el británico Daniel Evans (26°).
Por eso se esperaba que el jugador con más semanas como número uno de la historia, volviera a sonreír en su casa. Pero la verdad es que la gran semana que llevaba Djoko (había ganado los dos partidos previos por 6-1 y 6-3) se vio cortada de golpe. El responsable, Aslan Karatsev.
Fue en un partido maratónico en donde el hasta unos meses desconocido tenista, logró bajar al número uno del mundo de su torneo. El juego extremadamente potente e intenso del “León” fue la clave del encuentro. Serbia lamenta la temprana despedida de su ídolo y Rusia se frota las manos con su nuevo exponente.
El oriundo de Vladikavkaz es la gran sorpresa de este 2021 sin lugar a duda. Comenzó el año en la posición 112 del ranking y cuatro meses después ya está metido entre los treinta mejores. Hizo semifinales del Australian Open (donde perdió con Djokovic) llegando desde los clasificatorios y un mes después ganó el ATP 500 de Dubái. Este domingo jugará su primera final de un 250 ante Mateo Berrettini (10°) o Taro Daniel (126°).