“No respetaban a nadie, eran animales en la tribuna”: la cronología de la batalla campal que impactó a México y el mundo

Hinchas peleando en el estadio de Querétaro. Foto AP.
Hinchas peleando en el estadio de Querétaro. Foto AP.

Un aficionado del Atlas detalló el brutal enfrentamiento entre fanáticos del Querétaro y del cuadro rojinegro, que según información oficial registra 26 heridos. El presidente de la nación azteca asegura que la trifulca se produjo por "los resabios de los gobiernos neoliberales anteriores". En la FIFA miran con atención.



El fútbol mexicano tuvo este sábado uno de sus momentos más tristes. De esos que no quieren volver a vivirse jamás. Fanáticos del Querétaro y del Atlas se enfrentaron en diferentes sectores del estadio La Corregidora con un nivel de agresividad que no dejó a nadie indiferente.

Una tragedia que ha impactado al mundo entero y que podría cambiar los planes de la FIFA en cuanto al Mundial que tiene a México como una de sus sedes para el 2026. Hoy, según los reportes locales, 26 personas lesionadas que requirieron atención médica hospitalaria (24 hombres y 2 mujeres), de las cuales tres ya fueron dadas de alta. De los 23 pacientes hospitalizados, 3 se encuentran en estado de gravedad, 10 delicados y los 10 restantes se reportaron en buen estado.

Cuando el cronómetro del duelo entre ambos equipos señalaba los 63′ y el marcador indicaba una ventaja por la cuenta mínima para los visitantes, una pelea entre fanáticos a toda violencia se desató en las tribunas, causando que el resto de los presentes huyeran hacia el campo de juego desesperadamente. En videos que circulan por las redes sociales, un grupo menor de ambas fanaticadas se insulta a través de una reja, con gestos ofensivos. De un momento a otro, la separación entre ambas barras se abre y se genera el caos inmediato. “Ahora sí hijos de su pinche madre”, se alcanza a escuchar en la filmación, mientras comienzan a correr los seguidores del conjunto visitante.

Willy Sepúlveda, uno de los simpatizantes del Atlas que presenció la situación, detalló lo vivido el sábado al sitio Mediotiempo, apuntando a la Secretaría de Seguridad del Estado de Querétaro como la responsable. El inicio fue impactante. Y la situación fue empeorando cada vez más.

“Hubo un momento en el que estaba escalando, que ese grupo de personas estaba acércandose a nosotros y a final de cuentas se logró abrir el enrejado. Lo que hice fue correr de la rampa a la cancha, pero más tarde llegaron los barristas del Querétaro. Empezaron a golpear a familias, a niños y mujeres de forma indiscriminada y eso fue un punto de no retorno”, manifestó.

“Pongo como principal responsable a la Secretaría de Seguridad del Estado de Querétaro por haber subestimado el riesgo, por únicamente haber colocado policías estatales afuera y adentro únicamente seguridad privada que no estaba capacitada”, añadió.

Los ojos presentes apreciaron una serie de hechos repudiables. Una persona fue golpeada y cayó sobre una de las líneas que marcan los laterales de la cancha. También hubo lanzamientos de objetos desde la cancha hacia las tribunas. El sector donde se ubica el VAR fue invadido y, posteriormente, dañado. La pantalla para revisar los videos terminó destruida. Muchos hinchas del cuadro local, sorprendidos por la agresividad que reinaba en el estadio, facilitaron sus camisetas a fanáticos del Atlas para que no fuesen agredidos. Los futbolistas se dirigieron a camarines para evitar agresiones.

Sepúlveda, además, aseguró que miró a “dos señoras de entre 40 y 50 años” encargadas de la seguridad del sitio donde se ubicó la hinchada de los Zorros. “Cuando vieron que el pleito estaba escalando, una de ellas se puso a llorar”, aseveró.

El simpatizante aseguró que “no hubo provocación” por parte de los seguidores del cuadro rojinegro, aparte de los cantos típicos de una fanaticada a la otra. Los hinchas locales recorrieron prácticamente todo el campo de juego para llegar a golpear a algunos de los integrantes de la parcialidad rival. Un momento de descontrol puro, que, además, dejó en evidencia la ineficiencia del personal de seguridad.

Finalmente, señaló que no vio fallecidos tras la pelea, aunque tampoco descarta aquella posibilidad: “A mí no me consta, vi personas inconscientes en posiciones que no son normales para una persona viva por cómo estaban desarticulados, pero no me consta, lo hago desde la suposición de una persona que no se movía y que no veía respirar. Sabrá más el equipo médico, pero sí me preocupan esas versiones”.

Washington Aguerre, el portero del Querétaro, también agregó antecedentes. “El fútbol se tiñó de rojo. Todavía no caigo. Fue muy fuerte ver a niños corriendo. Había animales en la tribuna, no respetaban a nadie”, dijo el portero uruguayo a TyC Sports. “Ver videos y fotos me generaron tristeza. Hubo niños de Querétaro que me dijeron que no querían volver a la cancha”, apuntó el portero sudamericano.

Según reportes mexicanos, la tragedia no surgió en el momento, sino que los barrabrava del Querétaro involucrados advirtieron sobre sus planes días antes y que, pese a ello, la seguridad no se reforzó para intentar evitar lo que concluyó en un episodio de alta brutalidad.

El gobernador de Querétaro descarta fallecidos, pese a las impactantes imágenes que dieron la vuelta al mundo y a las versiones iniciales que señalaban al menos 17 víctimas fatales. “Es una tragedia porque, aunque no hay muertos, no podemos decir que no es una tragedia y no podemos permitir que se politice. Es muy lamentable que se mienta y que se desinforme”, señaló Mauricio Kuri.

El presidente de México, Andrés López Obrador, buscó responsables. “Debemos tener en cuenta, en consideración, ante estos hechos lamentables, que se debe continuar moralizando al país y atendiendo los orígenes de la violencia, las causas de la violencia. Son resabios de los gobiernos neoliberales anteriores”, dijo en conferencia de prensa. “Hay que atender las causas de la violencia, combatir la desigualdad económica y socia”, agregó.

La situación salpica también a la FIFA. Esto, porque México, junto a Estados Unidos y Canadá, será sede para el Mundial del 2026. Sin embargo, la seguridad exhibida durante los hechos muy probablemente llevará a la federación internacional a analizar nuevamente a los países que albergarán la cita planetaria. Hoy, la confianza en cuanto a eso es mínima. Este martes, de momento, los clubes aztecas están citados para buscar penas por lo sucedido. Lo único seguro es que lo visto en Querétaro no se puede repetir en ninguna cancha.

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