Las llamadas encerronas llenan las redes sociales y se toman la agenda del país. Situaciones cotidianas, en las que delincuentes intentan robar automóviles, sobre todo de alta gama, haciendo descender a sus ocupantes de manera forzosa, muchas veces con armas de fuego.
Así también ocurrió al futbolista colombiano Yorman Zapata, una de las figuras en el ascenso de Magallanes, equipo que jugará en la primera categoría después de 35 años.
El atacante transitaba junto con su representante por Américo Vespucio en la comuna de Maipú, cuando otro vehículo les cerró el paso para luego amenazarlos con armas de fuego.
“Un auto se cruzó, mi representante frenó de golpe y salió en reversa de una. Reaccionó muy bien, si hubiera parado nos hubieran quitado el auto. Y ahí fue que sonó un estruendo”, cuenta el futbolista a El Deportivo.
Y agrega que “vivimos un momento de mucho miedo, porque nos dispararon, parece que el apuntaron al automóvil, un Mercedes Benz. Pero gracias a Dios no estuvieron cerca nuestro”.
Una situación incómoda, que ocurrió justo después del triunfo de los carabeleros ante Recoleta, victoria que permitió el regreso del elenco metropolitano a la división de honor.
“Esto pasó después del partido, tras la celebración por el título de la Primera B. Fue entre las 10 u 11 de la noche. Fueron momentos complicados. Cuando ya después íbamos en la autopista nos dimos cuenta de que quedamos con mucho miedo”, relata Zapata.
Asimismo, insiste en que “a mí nunca me había sucedido algo como esto. Sí había visto que ocurría. Pero cuando a uno le pasa realmente es una situación complicada. No hicimos la denuncia. Después del incidente mi representante me habló para tener las precauciones de andar tarde en la noche. Incluso antes de que nos ocurriera esto, yo le había comentado a mi representante que por qué había que tener tantas precauciones. Justo salimos y después nos pasó eso”.
Una vez acontecido el intento de robo, el delantero no quiso preocupar a las autoridades del club, para no alterar los festejos por este regreso a Primera. Sin embargo, pasado un par de días, se informó al cuerpo técnico.
“Cuando ocurrió esta situación no quise informar de inmediato al club porque no quería estropear las celebraciones del plantel. Ahora tengo entendido que el entrenador ya está al tanto de lo ocurrido”, asegura el vallecaucano.
Consultado si había vivido una situación parecida en su natal Colombia, el jugador respondió que “no, es que allá yo vivo en un pueblo chico, en Puerto Tejada, a 15 minutos de Cali. Ahí todos nos conocemos”.
Futuro en primera
Han sido días ajetreados para Yorman Zapata. No solo por la encerrona, sino también por el bueno momento deportivo que vive su equipo. Una situación que pone al puntero cafetalero como uno de los jugadores en vitrina, con un interés real de Colo Colo y Universidad Católica.
¿Cómo están como plantel después de lograr el ascenso?
Es algo increíble. Estamos muy felices por este logro, es algo que esperábamos ansiosamente.
Colo Colo y la UC lo siguen de cerca…
En realidad, no sé qué sucederá en mi futuro. Yo tengo contrato vigente con Magallanes, el que termina en diciembre del próximo año. No sé si estará pasando algo ahora al respecto, algún interés de otro equipo.
La UC es dueña de parte de su pase ¿Volvería a San Carlos de Apoquindo?
Si se llegara a dar la oportunidad, toca hablarlo y conversarlo. Si es algo bueno para mí tendría que analizarlo para tomar una decisión. Católica tiene el 25% de mi pase. Cualquier club que me quiera llevar tiene que negociar directamente con Magallanes.
¿Tiene cláusula de salida?
No estoy al tanto de la suma. Pero yo creo que debo tener una cláusula de salida. Pero yo creo que esta ha sido mi mejor temporada de mi carrera en el fútbol.
¿Cómo está el plantel para el final de la Copa Chile ante Unión Española?
Uno está metido en lo que viene. Empieza a darle vueltas al tema, porque es un partido importante. Hace mucho tiempo que Magallanes no lograba esto y a medida que pasaban los partidos podíamos darnos cuenta de la importancia.
¿Cuál es la receta del éxito de este equipo?
La clave es que lo que entrenábamos lo poníamos en práctica en los partidos. Muchas veces uno prepara algo y en el encuentro todo cambia. Yo creo que es concentración nos llevó a tener buenos resultados. Al margen de las derrotas y los empates, nunca perdimos la esencia.
¿Cómo se integraron los más experimentados como Luis Jiménez, Carlos Villanueva o César Cortés?
Fueron un gran aporte. Son jugadores con mucha trayectoria que nos ayudaron mucho. Siempre están ahí para dar un consejo. En momentos de partido mantuvieron una mentalidad positiva. Los más grandes del equipo todos son muy humildes. No son de estar regañando y cosas así. Siempre viendo el lado bueno. Si perdíamos nos decían que todo pasaba por algo, que era el camino. Eso nos hacía fuertes y al final de temporada se vieron los frutos.
¿Le gustaría partir a un equipo grande de Santiago?
Uno como futbolista es ambicioso y quiere lograr cosas. Pero vamos paso a paso. Veremos qué ocurre después de la final de la Copa Chile y analizaremos el futuro.