Ñublense logra un triunfo de oro en Curicó y da un paso clave hacia la fase de grupos de la Copa Libertadores

En la Séptima Región se enfrentaron Curicó Unido y Ñublense, dos equipos que no cabían de la felicidad. Dos elencos con técnicos chilenos que durante todo el año hicieron muy bien las cosas y que recibieron su merecido e inédito premio: clasificar por primera vez a la Copa Libertadores. Sin embargo, todavía quedaba un capítulo más y ese era definir quién entraba en la fase de grupos. Por eso, el espectáculo en el estadio La Granja estuvo lleno de emociones y fue el cuadro visitante el que dio un paso vital al imponerse por 1-2, con un Alexander Aravena espectacular.

Desde muy temprano, el partido prometió un ambiente digno de un clásico. Cada pelota se disputó con fiereza y bastante roce entre los actores, con cargas de ida y vuelta. En eso estaban, cuando la presión del local surtió efecto. Mario Sandoval se llenó de amagues para buscar un claro y con un remate cruzado muy potente abrió la cuenta, desatando el delirio de las más de 7 mil personas que llegaron al recinto maulino.

A pesar del tanto, los Diablos Rojos, que no hacían un mal partido, se vieron más determinantes. El tridente compuesto por Aravena, Nicolás Guerra y Patricio Rubio fue una constante preocupación para la zaga local, que en la fecha anterior sufrió la lamentable baja de Matías Cahais, por una rotura del tendón de Aquiles, y tampoco contó con Ronald de la Fuente.

La escuadra tortera comenzó a ceder el protagonismo y el cuadro chillanejo se apoderó del balón. Aravena tuvo el empate a los 12′ y a los 28′, con sendos remates desviados estando en muy buena posición. A la tercera, el Monito no perdonó. En el minuto 34′, se metió entre los centrales tras un saque lateral con dirección al área, y con mucha viveza capturó el balón y definió con categoría ante la salida de Fabián Cerda.

El empate caló hondo en el dueño de casa, que no se encontraba desde mitad hacia arriba. Salvo los arranques de Bayron Oyarzo por la izquierda, ni Rodrigo Holgado ni Federico Castro estuvieron abastecidos, por lo que las situaciones de ataque se limitaron a intentos de media distancia. Mientras que el visitante se animó a ir por más, ya que el empate no le favorecía, debido a la mejor diferencia de gol del cuadro curicano.

Pese a la presión que hubo sobre Federico Mateos, los movimientos de Matías Moya fueron una vía bien aprovechada por el elenco de Jaime García, pues eso fue lo que desacomodó el circuito defensivo albirrojo y le generó espacios al tridente de ataque.

El segundo tiempo partió con el mismo vértigo del primero. Ñublense avisó con dos llegadas claras antes de los tres minutos, mientras que Oyarzo contestó con un remate a tres dedos que obligó a reaccionar al portero Nicola Pérez.

El local comenzó a concentrar los ataques por el sector derecho y en algún momento logró equilibrar las acciones. No obstante, la visita tenía preparada una genialidad. Una exquisita descarga de Aravena tras un pivoteo de Mateos encontró perfilado a Guerra, quien definió de primera para dar vuelta el partido (60′). Un golazo por la visión de juego y por la ejecución.

Recién a los 66′, Damián Muñoz mandó a la cancha al goleador Diego Coelho y Curicó Unido pasó a jugar con tres atacantes. Jaime García, por su parte, respondió enviando a Manuel Rivera para contrarrestar el peso ofensivo del local.

Con el correr de los minutos, los ánimos se fueron caldeando y el cuadro albirrojo intentó con más ganas que fútbol, pero el buen trabajo defensivo de los Diablos Rojos, especialmente el de Rafael Caroca, fue clave para controlar al trío de atacantes locales, que buscaron el empate hasta el último segundo. Así, los minutos pasaron y Ñublense cerró una victoria que lo deja a un paso de la fase de grupos de la Copa Libertadores y de los US$ 3 millones que ofrece la Conmebol por alcanzar esta instancia. Para que eso ocurra deberá ganar o empatar ante Colo Colo en la última fecha en Chillán o esperar que Curicó no sume en su visita a Coquimbo Unido.

Curicó Unido: Cerda; Gómez, Bechtholdt, Rojas, Opazo (85′, Cortés); Sandoval, Nadruz, Albornoz (56′, Fritz); Oyarzo (66′, Coelho); Castro y Holgado. DT: D. Muñoz.

Ñublense: Pérez; Cerezo, Vargas, Caroca, Campusano; Reyes, Moya (72′, Moya), Mateos, Aravena (90+2′, Guerrero), Guerra (82′, Cordero) y Rubio. DT: J. García.

Goles: 1-0, 8′, Sandoval; 1-1, 34′, Aravena; 1-2, 60′, Guerra.

Árbitro: R. Carvajal. Amonestó a Oyarzo, Cerda y Sandoval (C); Cerezo, Vargas, Guerra, Campusano, Rivera y Pérez (Ñ). A los 90+5′, expulsó a Sandoval, por doble amarilla.

Estadio La Granja de Curicó. Asistieron 7.256 personas.

En cursivas, jugadores juveniles.