Nueva arremetida de la Segunda División contra la ANFP: amenazan con suspender su participación en la temporada 2025
Los clubes de la tercera categoría del fútbol chileno endurecen su postura ante lo que califican como "inacción" del ente presidido por Pablo Milad, por lo que anuncian una serie de medidas.
La guerra entre los clubes de la Segunda División y la ANFP continúa. Y ahora las instituciones de la tercera categoría del fútbol chileno subieron su nivel de amenazas y aseguraron que no se presentarán a jugar el próximo año, hasta que no se llegue a un arreglo con la Asociación Nacional de Fútbol Profesional.
“Ante la reiterada inacción de la ANFP, y en paralelo al camino judicial liderado por el abogado Davor Harasic, hemos decidido adoptar una medida drástica: no comenzaremos nuestra participación en la temporada 2025 del fútbol profesional ni inscribiremos jugadores en los registros de la ANFP mientras nuestras demandas no sean escuchadas y abordadas seriamente”, comunicaron 11 de los 14 clubes que componen la categoría, mediante un comunicado
¿Qué fue lo que pidieron? Tres cosas: apoyo económico del ente rector para todas las instituciones que integran este torneo, recibir parte del dinero de la final disputada entre Deportes Melipilla y Deportes Concepción y participar con voz y voto en el consejo de presidentes de la actividad, pues, tal como aseveraron, “nos parece inaceptable que, nuevamente, se haya convocado exclusivamente a los clubes de Primera División y Ascenso (Primera B) para trabajar las bases de sus torneos, dejando fuera a nuestra división. Esta práctica discriminatoria contradice los valores de respeto, inclusión y diversidad que la ANFP proclama en sus comunicaciones”.
También acusaron que existe indiferencia hacia sus reclamos y la propuesta de tener los mismos derechos y deberes de las oncenas que participan en la Primera división y en la Primera B. “A más de dos semanas de haber emitido nuestra declaración del 4 de noviembre, no hemos recibido ninguna respuesta oficial ni extraoficial por parte de la ANFP. Este silencio, a pesar de los serios problemas expuestos, refleja una preocupante falta de interés hacia una categoría que cumple un rol fundamental en el desarrollo del fútbol chileno y da sustento a miles de familias”, enfatizaron.
“Con sorpresa e indignación recibimos la programación oficial para 2025, que establece el inicio de la Copa Chile los días 18 y 19 de enero, adelantando nuestra participación en más de un mes respecto a lo esperado. Esta medida, tomada sin consultarnos, implica un incremento insostenible en nuestros costos operativos, en un contexto económico ya precario para la división”, agregaron.
Por lo que “más de 350 jugadores y 50 integrantes de cuerpos técnicos quedarán fuera de sus labores el próximo año, con consecuencias directas para sus familias y comunidades”, continuaron. Cabe recordar que uno de los líderes de este levantamiento es el otrora presidente de la ANFP y actual dueño de Trasandino, Harold Mayne-Nicholls.
“En Trasandino ya lo habíamos evaluado hace un par de años. El año pasado, sin ir más lejos, mandamos una carta a la Comisión Jurídica de la ANFP y al directorio de la ANFP, nunca tuvimos respuesta. Y cuando lo planteamos en esta reunión, todos se sumaron porque, lamentablemente, las respuestas que recibimos normalmente no son lo que estamos esperando para solucionar problemas, sino que son permanentes respuestas del tipo ‘lo vamos a evaluar y lo vamos a revisar...’”, aseguró a El Deportivo.
Acto seguido, detalló la gran sangría económica que significa mantener un club en esta división. “Es un costo financiero impresionante. Nosotros creemos que son mínimo 5 mil millones de pesos, pero puede andar del orden de los 7.000 millones fácilmente. Si no fuera por el éxito de Deportes Concepción este año, superaríamos esa cifra”, reveló.
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