El león enjaulado lo volvió a hacer. Así dijo sentirse Alexis Sánchez cuando no jugaba en Inter. Otra vez respondió a la confianza del técnico de Simone Inzaghi y fue vital en otro logro. Inició la jugada del primer tanto y convirtió el segundo, con un golazo, en el 2-0 de su equipo ante la Roma para así avanzar a la semifinal de la Copa Italia.
Aunque los lombardos encontraron rápidamente la ocasión de irse en ventaja. Con un Alexis clave, quien habilitó de cabeza el desborde de Ivan Perisic. El croata centró y Edin Dzeko solucionó el problema con un remate de primera.
Se jugaban menos de dos minutos y el campeón del scudetto ya le había dado el primer golpe a los dirigidos de José Mourinho. Y en esa primera jugada, ya quedó en evidencia la actitud y la concentración del tocopillano.
Un gol que soltó a los dirigidos de Simone Inzaghi. El mejor momento de los interistas que pudieron aumentar las cifras antes de los seis minutos, cuando el remate de Nicoló Barella dio en el palo.
Un cabezazo de Skriniar fue otro aviso, lo mismo que un remate de Dzeko. Sin embargo, en ambas ocasiones, la reacción del meta capitalino Rui Patricio impidió la celebración.
Pero el cuadro nerazzurro poco a poco se fue diluyendo. El mediocampo, donde la labor de Arturo Vidal tuvo muchos altibajos, comenzó a perder la pelota en la salida. Sin embargo, ni Tammy Abraham y menos Nicoló Zaniolo pudieron capitalizar el empate.
Golazo del chileno
En el inicio del complementario, el cuadro de los chilenos no lograba despertar. Como si el fantasma del partido ante el Milan, que lo dio vuelta en el final, otra vez se hubiera aparecido en el Giuseppe Meazza.
Fueron los mejores 15 minutos del cuadro de Mou. Pero, como en toda la jornada, su equipo no tuvo la puntería y rapidez para derrotar al atento meta Samir Handanovic.
Entonces la genialidad del Niño Maravilla otra vez hizo la diferencia. Con la personalidad y el aplomo característicos de su juego, el tocopillano no dudó en ensayar un fuerte derechazo desde 25 metros. Un tiro directo, con una velocidad tal, que la pelota se coló en el ángulo derecho de la portería de Rui Patricio.
Tal como ocurrió en la ronda anterior ante Empoli, el Dilla salvaba la película en el peor momento de su equipo. El mismo jugador que logró el tanto del título en la Supercopa ante Juventus y que pide a gritos una camiseta de titular.
Un nuevo gol que ahora cambió el destino del partido, lo puso en el congelador. El cuadro de La Loba se desesperó y fueron los locales los que estuvieron más cerca del tercero, que su rival de un descuento.
A cinco del final, Matías Vecino reemplazó a un Vidal intrascendente, mientras su compatriota y amigo seguía dentro del campo de juego.
No hubo tiempo para más. Inter golpeó en los momentos precisos, con un Alexis inspirado, y se metió en la semifinal de la Copa Italia, en la que espera el ganador de la llave entre Milan y la Lazio.