Otra vez en líos: los escenarios judiciales que puede enfrentar Jordhy Thompson por reunirse con la pareja a la que tenía prohibido acercarse

Jordhy Thompson vuelve a estar en el centro de la polémica. El volante de Colo Colo fue registrado junto a su pareja, Camila Sepúlveda, a quien tiene prohibido acercarse por orden de la justicia. La medida es una de las cautelares que el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago le impuso como parte de la suspensión condicional del procedimiento que pudo derivar en un juicio en su contra por violencia intrafamiliar, según la denuncia de la estudiante de Obstetricia. Al antofagastino se le ordenó, también, abonar una suma superior a los dos millones de pesos por la destrucción de artículos electrónicos correspondientes a Sepúlveda y someterse a terapia para prevenir recaídas en la conducta. Las últimas dos exigencias las cumplió cabalmente.

El quebrantamiento de la primera disposición, que se hizo público después de la revelación de una imagen en que Thompson y Sepúlveda aparecen juntos en el cumpleaños de la esposa de Marcos Bolados, puede volver a meter en líos al jugador nacido en la cantera del Cacique. En rigor, el tribunal podría tomar medidas inmediatas. De hecho, el Ministerio Público pidió la reapertura del juicio, en una señal clara.

Darío Guajardo, especialista en materia penal, explica los escenarios que puede enfrentar Thompson. Las opciones son variadas y dependen de la perspectiva que adopte el tribunal. “La más común es que, por haberse verificado el incumplimiento se deje sin efecto la suspensión de la causa y se reactive el juicio. Ahí, sí, tendrá definitivamente una determinación de condena o absolución”, establece. “Se tendría que citar a una audiencia de revocación de suspensión condicional del procedimiento”, explica el jurista, apunta, respecto de la gestión relativa.

Sin embargo, la situación está lejos de ser absoluta. “Si la víctima se encontró con Thompson y hay cierta aceptación, se pone difícil que haya éxito en la causa”, precisa Guajardo. Eso sí, explica que la prohibición es amplia y no solo está referida a términos violentos.

De todas formas, para esta situación específica, al tribunal se le podría complicar hasta la comprobación del registro. “Podría cuestionarse, por ejemplo, la fecha de la foto”, sostiene Guajardo. De todas formas, se presume que los involucrados actúan de buena fe.

La tercera opción es más compleja, pero igualmente poco práctica: que se configure el delito de desacato. En ese caso, las penas fluctúan entre los 18 meses y los cinco años de presidio. Sin embargo, la probabilidad de que se llegue a ese extremo es menor. “Es muy remoto”, puntualiza el profesional.

En Colo Colo, el impacto de la imagen generó inquietud. De hecho, el nombre del futbolista y el del club tardaron poco en transformarse en las materias más comentadas en las redes sociales. En esos espacios, tal como le sucedió este sábado, en el duelo ante Coquimbo Unido, Thompson aún recibe repudio. Al club se le sigue exigiendo una medida más

A nivel de directorio, la materia fue remitida a la gerencia deportiva, que encabeza Daniel Morón, que a su vez tiene que pedirle explicaciones al técnico Gustavo Quinteros, aunque con la observación de que en ese caso la responsabilidad es personal, por tratarse de una actividad ajena al club e inherente a la vida personal del involucrado.

Thompson es parte de la lista con la que el Cacique se medirá ante Universidad Católica en la final de ida de la Zona Centro Norte de la Copa Chile.