Palestino dejó escapar el triunfo sobre O'Higgins en la última jugada del partido

PALESTINO 2 OK

Árabes y celestes igualaron 1-1 en el inicio de la séptima fecha del campeonato.



Palesino 1-1 O'Higgins

Palestino: I. González; G. Soto, N. Díaz, E. Guerrero, B. Véjar; D. Rosende, J. Fernández, C. Cortés (46', S. Silva); L. Jiménez; F. Ahumada (68', R. Paredes), L. Passerini (78', R. Tarifeño). DT: I. Basay.

O'Higgins: M. Pinto; P. Magalhaes, A. Acevedo, J. Fuentes, R. Cereceda; T. Alarcón (78', L. Fierro); F. Ramírez (46', M. Sepúlveda), R. Fernández; M. Salas, D. Salazar (46', R. Osorio), J.L. Muñoz. DT: M. A. Figueroa.

Árbitro: C. Deischler. Amonestó a Fernández, Passerini (P); Muñoz, Osorio (O). Expulsó a Fernández (89'), por doble amonestación.

Goles: 1-0, 35', Passerini, de media vuelta a la entrada del área; 1-1, 90'+4', Acevedo, de cabeza.

Estadio Municipal de La Cisterna. Asistieron 1.000 personas aprox.

Palestino tenía una victoria en el bolsillo. Después de jugar mejor y hacer mayores méritos para quedarse con la victoria sobre O'Higgins, los celestes rescataron un postrero empate en el cuarto minuto de descuento.

Los árabes habían aprovechado de buena manera el impulso anímico de la Copa Libertadores. En el inicio de la séptima jornada, los de Ivo Basay vencían a O'Higgins, en La Cisterna, y volvían a ganar después de dos fechas sin hacerlo.

Los árabes se encontraron con un partido cómodo. Su buen funcionamiento no encontró real oposición en las dudas de los rancagüinos, que carecieron de ideas y hasta de personalidad para hacer frente al compromiso.

La buena combinación de Jiménez, Rosende y Fernández en la mitad de la cancha, más el aporte constante de Guillermo Soto por la banda derecha, le dio réditos a los de colonia, que manejaron sin mayor contrapeso el trámite del encuentro. Tras acorralar a la visita en su terreno, el argentino Passerini abrió la cuenta con una certera media vuelta cuando se disputaban 35 minutos de partido.

Y siguieron buscando. Bajo la conducción y liderazgo de Jiménez, los tricolores encontraron los caminos para hacerle daño a su adversario que, al menos en la primera mitad, se limitó a refugiarse cerca de su arco y a buscar salir mediante incontables e infructuosos pelotazos largos, generando la desesperación de Marco Antonio Figueroa en la banda.

En el complemento, los de la Sexta Región se acercaron un poco. El ingreso de Matías Sepúlveda le dio un nuevo aire a los celestes, que con vergüenza deportiva buscaron adelantarse y oponer mayor resistencia ante un rival que irradia confianza.

El renovado espíritu con el que los sureños enfrentaron el segundo tiempo permitió la aparición estelar de Ignacio González, que al menos tres veces salvó su arco durante el complemento.

El meta le ponía candado a su arco en el momento justo, cuando sus compañeros evidenciaban el desgaste del duelo de mitad de semana contra Alianza Lima. Pero no estaba dicha la última palabra. El propio Passerini pudo sentenciar el cotejo, pero falló el segundo, definiendo por sobre el travesaño una acción en la que incluso logró dejar en el camino al arquero Miguel Pinto.

Fue el derrumbe árabe. Las dos intervenciones que tuvo González en los primeros dos minutos de descuento fueron la previa de lo que vendría en los últimos tres. Basay se desesperaba en la orilla, acaso previendo que su defensa se desmoronaba. Y hubo premio para O'Higgins, que hizo un partido opaco, pero buscó hasta el final, aprovechando el bajón físico de su rival. Así, Acevedo marcó de cabeza en la última jugada del encuentro, para robarle dos puntos a los de La Cisterna y firmar una paridad que le sabe amarga a los dos equipos, que siguen sin encontrar el despegue definitivo en el presente campeonato.

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