Para el clásico ante Universidad Católica, la Garra Blanca tenía una sorpresa especial, una para el capitán de Colo Colo, Esteban Paredes. A dos minutos del pitazo inicial, un lienzo con la camiseta 7 de los albos homenajeaba y pedía al goleador en cancha, quien con una evidente felicidad agradecía con gestos hacia los hinchas, luego se sentaba, y veía la caída de sus compañeros. "Paredes, Paredes", cantaban los fanáticos sin conmover a Mario Salas. Eso hasta el minuto 57', cuando el Tanque reemplazaba a Costa. "Oh, dale capitán", alentaba la hinchada, antes de que la UC marcara el 0-3.
El cambio natural para que entrara Paredes, goleador del último campeonato, era Andrés Vilches, pero el Comandante prefirió verlos juntos. Y no falló. El nueve que metía goles por la UC en diciembre pasado, los hizo esta vez en su contra: un cabezazo a los 73' y una definición en el área chica a los 85', tras pase del regalón de la gente, Paredes, que casi marca el empate de cabeza a dos minutos del final.
En su retiro de camarines, el goleador albo de hoy prefiere no hablar, mientras que el de toda la vida, se rinde ante su hinchada: "Les agradezco mucho por todo".