Partido caliente en Brasilia. Lo refleja el trámite del juego, de fricción permanente y disputas cerradas en busca del balón, pero, sobre todo, la forma en que terminó la primera fracción. Los jugadores chilenos y paraguayos intercambiaron palabrazos en el camino hacia los vestuarios, después de que el juez colombiano Wilmar Roldán dio por concluidas las acciones en la primera etapa.
Gary Medel y Arturo Vidal por el lado nacional y Miguel Almirón y Gustavo Gómez por el de la escuadra de Eduardo Berizzo fueron los más activos en el encontronazo. Sin embargo, más allá del amago de enfrentamiento, la situación no pasó a mayores y ambos equipos continuaron la ruta hacia el descanso.
Al regreso al campo de juego, para iniciar la segunda etapa, el Pitbull se acercó al equipo paraguayo para ofrecer disculpas.