Paulina Vega y Daniela Ortega no pudieron ante la dupla estadounidense de Amy Wang junto a Rachel Sung. Pese a que fue un partido igualado por momentos, las norteamericanas sacaron a relucir lo mejor de su repertorio en la manga definitiva y lograron imponerse por 4-2.
La dupla nacional tuvo un primer set muy ajustado. Fue tanto así, que se definió a los 11 puntos, sino que tuvieron extender a dos de diferencia. En esa instancia de desempate, el dúo de Estados Unidos fue más eficiente y se impuso por 12-10. Claro que el marcador daba a entender que sería una lucha pareja entre ambas escuadras. Paulina Vega y Daniela Ortega, pese a estar abajo, se veían tranquilas con lo exhibido hasta el momento.
Luego de una breve charla con el entrenador Francisco Seijas, las chilenas salieron con todo. Se quedaron con la manga con un contundente 11-5. Atacaron mucho y aprovecharon bien su servicio. Las norteamericanas cometieron errores en aquella instancia y las chilenas lo aprovecharon. Las cosas se daban tal como se preveía. Y la mesura de Ortega junto a Vega se explicaba tras igualar el partido.
La tercera manga fue opuesta. Las norteamericanas tomaron la iniciativa y no cortaron su buena racha. Atacaron con pelotas profundas y pese a la agresividad de las locales, el 11-6 fue contundente. Esa dinámica se mantuvo en el arranque del tercer tiempo, ya que las forasteras estuvieron 3-0 arriba. No obstante, todo cambió cuando Chile hizo pie en la manga. Con una remontada espectacular en aquella parte del juego, lograron imponerse por 11-5 e igualar las acciones nuevamente. Nadie regalaba nada en el CEO. A diferencia de otras ocasiones, la tensión se transmitía, incluso, desde las gradas.
En este golpe a golpe, Estados Unidos volvió a tomar la delantera. Ganó por 11-6 en el juego 5 y obligaba a las nacionales a empatar -de nuevo- el compromiso. Pero no ocurrió. En esta ocasión, se dio la mayor distancia de la jornada. En el sexto set, las norteamericanas no cometieron errores y terminaron sacando una contundente ventaja de 11-3 para llevarse el partido.
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Nicolás Burgos y Gustavo Gómez eran una gran esperanza de oro para el tenis de mesa nacional. Así lo establecía Marcos Núñez en diálogo con El Deportivo. “Ahora lo que esperamos es que se logre sacar el oro en doble varón. Queremos llegar a la final ahí”, sentenciaba el histórico exdeportista. Pero no se dio. En la mesa uno del CEO, sucumbieron ante la dupla Calderano - Ishiy.
En el primer set cayeron por 11-5. Luego, en el segundo, llegaron a estar arriba por 8-5. Sin embargo, la contundencia, sobre todo de Hugo Calderano -número 4 del mundo- fue acercando a los “visitantes” en el tablero. Fue una lucha sin tregua. Llegaron a estar 13-13. Ambos luchaban en su contexto. Los brasileños sabían que se trataba de un punto que los podría hacer inclinar el partido definitivamente. Los chilenos necesitaban igualar la serie para seguir soñando.
Finalmente, los nacionales sacaron ventaja de 16-14. Fue, sin dudas, uno de los mejores sets de lo que va de tenis de mesa en los actuales Juegos Panamericanos. Con el 1-1, la gente se fue encendiendo en el CEO. Ceacheis y “Olé Chile”, bajaban y se oían desde las tribunas.
Pese a la lucha que fue aquella manga, en el tercer juego, se repitió el resultado del primero: 5-11 quedaron abajo Burgos y Gómez. Nuevamente les tocaba remar desde atrás. Sin embargo, la distancia marcada fue un golpe duro para los chilenos, del que les costó reponerse. En el cuarto, Brasil inició con todo y se puso 5-0 arriba. Tras una charla con el head coach, los nacionales mejoraron su presentación. Pero a esa altura del set no era suficiente. 6-11 abajo. El quinto set podía ser definitivo.
Vitor Ishiy -que perdió ante Burgos en el certamen individual- y Calderano querían liquidar rápido. Chile inició arriba, sacó ventaja, Brasil igualó y los nacionales volvieron a adelantarse. Se podía repetir el panorama del segundo set. Pero Burgos y Gómez lo cerraron antes. Era el 3-2 y los nacionales obligados a ganar para igualar el compromiso. Otro resultado los sentenciaba.
Finalmente, la dupla brasileña se impuso en una contienda muy igualada. Fue 13-11 en el último set. La malla le terminó jugando dos puntos en contra a los nacionales y no pudieron avanzar a la disputa del oro con el 2-4 en contra.