En el tiempo añadido, un cabezazo de Paulo Díaz fue el salvador de River Plate en Brasil. En el duelo de ida por octavos de final de la Copa Libertadores, el elenco ‘millonario’ logró empatar 1-1 con Athletico Paranaense gracias al gol del seleccionado chileno, quien fue titular.
Se trató de un partido historiado, porque los de Curitiba tuvieron muchas bajas producto de un brote de coronavirus. Tanto así que jugó el arquero Bento, quien debutó como profesional en la noche del martes.
Las principales acciones del partido sucedieron en el segundo tiempo. En los 57′, los brasileños abrieron la cuenta mediante un gol de Bissoli, con un remate desde fuera del área. Nada que hacer Franco Armani. River no hacía un partido destacado. Era inofensivo en el área contraria. El partido tiene un quiebre en los 66′, porque Reinaldo recibe su segunda tarjeta amarilla. Expulsado.
En el tiempo añadido, Díaz se hizo grande. Antes había avisado con dos cabezazos y la tercera fue la vencida. Luego de un tiro de esquina de Álvarez, el ex San Lorenzo gana por arriba y vence al meta Bento. Tuvo una correcta actuación, incluso fue elegido como la figura del compromiso.
“Aliviado por el gol, pero nos vamos con el gusto amargo de no haberlo ganado. Nos vamos como si hubiese sido un 0-0 y nos jugamos pasar de fase en nuestra casa”, dijo Díaz después del partido. Al chileno se le abrió una ventana para ganar regularidad tras la venta a la Fiorentina de Lucas Martínez Quarta.
La vuelta entre brasileños y argentinos será la próxima semana, en la cancha de Independiente.