José Pekerman suele ser cauto. Sin embargo, tras la caída de Colombia frente a Inglaterra en los penales, que determinó el adiós cafetero en los octavos de final del Mundial, el estratega se quejó contra el arbitraje del estadounidense Mark Geiger.
"El partido fue muy áspero, muy rudo. Hubo muchas situaciones. Así se esperaba. Se hablaba mucho de la pelota para de Inglaterra y de Colombia. Esto fue incómodo, jugar un partido sabiendo que estaba en el aire la sensación de que siempre se iba a pitar algo. En el fútbol está pasando algo", declara el técnico argentino.
Luego analiza el trámite estrictamente futbolístico. "Los partidos en estas instancias son de 90 minutos y pueden ir a alargue. Inglaterra descansó a todos sus jugadores pero terminaron más cansados que los de Colombia. Seguro que se hubieran lamentado mucho si el resultado hubiera sido a favor nuestro. Fuimos valientes y equilibrados, pero nos faltó un poco de profundidad. Ambicionábamos más llegadas, pero fue difícil entrar en un partido en el que no teníamos tranquilidad. Tuvimos tensión y no conseguimos lo que sí en el segundo tiempo", explica.