A Colo Colo se le enredó un partido que parecía ya resuelto. A los 87 minutos, Gonzalo Sosa marcó el descuento para el 2-1 en el marcador ante los albos, que de ahí en adelante sólo se dedicaron a aguantar una ventaja que le daba tres puntos claves para meterse en la pelea por el Campeonato. Sin embargo, en la última jugada del partido ocurrió la gran polémica que pudo cambiar todo para los de Gustavo Quinteros.
Con Audax metido en el área rival buscando el empate, un centro desde la derecha da en el brazo de Agustín Bouzat. Los jugadores del cuadro itálico corrieron de inmediato donde el árbitro José Cabero para reclamarle con desesperación el penal.
Ante la incertidumbre de los 22 protagonistas, el juez se llevó la mano al oído. Cuando muchos pensaban que iba a ir a ver al VAR la acción, no lo llamaron, por lo que Cabero decidió acabar el partido, desatando la furia de los visitantes, quienes lo rodearon.
Un celular con la imagen del presunto penal
La desesperación de los de La Florida era tanta, que un miembro del cuerpo técnico ingresó con un celular a mostrarle la jugada a los futbolistas de Audax Italiano y al juez del encuentro, algo que está prohibido, por lo que lo expulsaron de inmediato del campo.