Penales a granel, cero rojas

Una de las mayores novedades de la edición 2018 de la Copa del Mundo ha sido la implementación del videoarbitraje (VAR), que ha resultado clave en parte de los 14 partidos que hasta ahora se han disputado en Rusia.

El uso de esta herramienta ha sido determinante para el desarrollo de los partidos, destacando en la sanción de los lanzamientos penales,consiguiendo así un alza en la estadística de infracciones sancionadas.

Hasta el momento, los árbitros han marcado ocho penales, de los cuales tres han requerido del apoyo de los asistentes de video.

El primer beneficiado de ellos fue Francia, selección que pudo ponerse en ventaja con un penal que en una primera instancia el árbitro había pasado por alto y luego su reloj tecnológico le alertó que cobrara el segundo tanto galo. El balón tras el tiro de Pogba había traspasado la línea de gol.

De igual forma, el VAR permitió que Perú tuviese la ocasión de desnivelar el marcador ante Dinamarca, aunque el atacante Christian Cueva falló su lanzamiento.  Más tarde, Dinamarca marcó el único gol que los dejó en la zona de clasificación en el Grupo C, junto a Francia.

Algo similar ocurrió en el duelo de ayer entre Serbia y Corea del Sur por el Grupo F, pues el juez creyó que el defensa asiático había sacado el balón antes de tocar al atacante y siguió con el desarrollo del partido hasta que le advirtieron que debía analizar la jugada viendo el monitor y decretando el tiro penal. Con estos cobros se llegó a la cifra de ocho penales sancionados, tres de ellos determinados visiblemente por el VAR.

Esta cifra recién se alcanzó en Brasil en el partido 25. En Sudáfrica 2017 llegó en el encuentro 35, mientras que en Alemania 2006 fue marcado en el duelo 40.

Otra de las características llamativas ha sido la ausencia de expulsiones. En el sexto partido de la Copa de 2014 fue mostrada la primera roja y en Sudáfrica apareció en el segundo encuentro.

Hay un aumento de faltas, lo que arroja un promedio de 30,07 infracciones y 3,1 amarillas por partido. Con el vivo riesgo de ser captado por las cámaras, como ocurrió con el serbio Aleksandar Prijovic, quien se salvó de la expulsión luego de que el juez senegalés Malang Diedhiou lo amonestara luego del aviso del VAR.

Para el ex juez FIFA y comentarista de La Tercera, Rubén Selman, esta edición del Mundial ha sido beneficiosa tanto para los jugadores que luchan por seguir en carrera por el trofeo, sino que también para los árbitros, pues "se está disputando mucho más tiempo real de juego y una mayor continuidad en las jugadas". Por otro lado, destaca la gran cantidad de penales sancionados, algo poco visto en este tipo de torneos. Por último, valora el comportamiento de los jugadores que "evitan el juego brusco, las simulaciones e intentar sacar ventaja de situaciones haciendo trampa".