César Pinares está viviendo un momento de reivindicación. El volante no lo pasó bien durante 2018 en Colo Colo, donde nunca gozó de continuidad ni tampoco se transformó en una alternativa real las veces que salía de la banca. De ser un jugador por el que el Cacique fue hasta la FIFA para destrabar su arribo, en unos pocos meses pasó a un completo segundo plano, disputando minutos residuales, y finalmente no fue considerado para esta temporada por la gerencia deportiva.

Pero el fútbol da muchas vueltas y Pinares está aprovechando su oportunidad desde que llegó a Universidad Católica. Su rostro y su actitud son otros, y la alegría que transmite en su juego se refleja fuera de la cancha. En medio de las celebraciones en el estadio Sausalito tras levantar su primer título con la UC, se da el tiempo para tomarse fotos con los hinchas que se le acercan, firma autógrafos y se detiene a hablar con los medios de comunicación.

En el césped poco a poco se ha ido convirtiendo en una pieza relevante en el esquema de Gustavo Quinteros, tomando el relevo de Diego Buonanotte en el papel de enganche y siendo protagonista de un equipo que, tal como él, va en alza tanto en el plano local como internacional. Un cambio que, según explica el formado en Colo Colo, se debe a la confianza que le ha otorgado el disfrutar de minutos regularmente y sentirse importante en el elenco cruzado.

"Simplemente estoy jugando, lo vengo haciendo con continuidad y eso ha hecho que mi rendimiento vaya mejorando. No hay otro motivo. Estoy contento porque el equipo está funcionando muy bien. La base ya estaba del campeonato del año pasado y uno tenía que venir y tratar de adaptarse lo antes posible al plantel. Lo bueno es que he encajado bien y estoy feliz de conseguir estos logros", señala Pinares.

La competencia interna por un lugar se hará más intensa con el retorno a su mejor forma física de Buonanotte tras su lesión, pero lo cierto es que el Enano no lo tendrá sencillo para desplazar a un Pinares que viene justificando su titularidad con actuaciones estelares como en la victoria ante Colo Colo en su retorno al Monumental, o la del sábado ante Palestino en la Supercopa.

"Se ha hablado mucho del hecho de ser titular por sobre Diego, pero somos once, no solo yo. El profe Quinteros tiene un esquema, ahora me está tocando jugar a mí, pero la competencia dentro del plantel es sana y uno tiene que luchar por un puesto. A eso vine a este club, así que hay que seguir así", asegura.

Su tanto de tiro libre ante el cuadro árabe cortó una sequía que lo tenía sin anotar oficialmente desde agosto de 2017, cuando vestía la camiseta de Unión Española. Su pegada es una de las facetas por las que más ha destacado en su carrera, pero además está exhibiendo un buen rendimiento jugando por el carril central, detrás del 9, con libertad para moverse por el frente de ataque y no pegado a una banda. A eso se le suma el buen entendimiento con César Fuentes y Luciano Aued, según Pinares, dos piezas claves para entender su acople al cuadro franjeado.

"Me siento muy cómodo con el esquema, jugando más por el medio. Tengo a César atrás que me llega a todas las coberturas, a Luciano que tiene una muy buena visión de juego y nos habilita muchas veces a nosotros en zona de tres cuartos. Nos sentimos cómodos jugando juntos, estamos funcionando muy bien y vamos a hacer todo para seguir por este camino", expresa.

Su buen momento lo pone además como una alternativa para la selección nacional. La falta de variantes en ataque del conjunto de Reinaldo Rueda y la vitrina de un club grande que disputa la Copa Libertadores lo convierte en una carta a considerar para la Copa América. El colombiano ya lo convocó para la fecha FIFA del pasado noviembre en los amistosos ante Costa Rica y Honduras, cuando Pinares no tenía continuidad en Colo Colo, por lo que su nombre ya ha figurado en el radar del caleño.

"Es lógico que estando en un buen nivel uno tiene chances de poder ser llamado. Pero vamos tranquilos, paso a paso. Quiero seguir consiguiendo cosas en el club, seguir elevando mi nivel y si llega un llamado, feliz", sentencia.