En su reunión del día martes, el directorio de la ANFP determinó dar por finalizado el partido entre Colo Colo y Universidad Católica, que fue suspendido por incidentes. En definitiva, los cruzados se impusieron por 0-2 en el Monumental, quedando como el único puntero del torneo nacional. El resultado se puede analizar desde otra perspectiva: la UC le saca nueve puntos de ventaja al Cacique recién transcurridas cuatro jornadas.
Se trata de una diferencia importante considerando que ambos elencos estaban llamados a ser los principales candidatos a quedarse con el certamen, por como se armaron de cara a un desafiante 2020, tanto en lo doméstico como en lo continental. Solo Católica está refrendando en la cancha el cartel de favorito. Por su parte, el elenco popular atraviesa por una seria crisis de resultados, que tiene a Mario Salas apuntado como el responsable.
Nueve puntos. Eso separa al bicampeón chileno de los albos. Es la primera vez que se da semejante distancia en puntaje entre ambos en un campeonato largo. No obstante, ya se había dado una situación así en campeonatos nacionales. En el Apertura 2011, jugadas cuatro fechas, la UC también tenía una ventaja de nueve unidades sobre Colo Colo.
Hay que retroceder nueve años. Mientras Católica era dirigida por Juan Antonio Pizzi y aún saboreaba el dulce sabor del título de 2010, en Colo Colo estaba Diego Cagna, quien arrastraba la frustración de haber perdido el título el año anterior cuando estaba todo dado para la celebración colocolina.
En 2011, la UC sumó nueve puntos de 12 posibles, producto de tres victorias: 0-2 a Iquique, 3-1 a Audax Italiano y 2-1 a Huachipato. Perdió 2-1 con Unión La Calera, en el antiguo estadio Nicolás Chahuán. El comienzo de los albos, por contraparte, fue terrible: cero puntos de 12 posibles. Cuatro derrotas al hilo. Cabe consignar que en la primera fecha había igualado 2-2 con Cobresal en un Monumental vacío, no obstante perdió 0-3 por secretaría. El Tribunal de Disciplina de la ANFP dictaminó la resta del punto obtenido en cancha por haber cometido errores reglamentarios. En rigor, fue por la mala inscripción del futbolista Johan Muñoz.
En la tercera jornada, la goleada 1-5 que propinó la Universidad de Concepción en Pedrero acabó con el ciclo de Cagna. Lo sustituyó Luis Pérez.
Arranque perfecto
"El fútbol que hicimos (ante Colo Colo) nos permite seguir ganando confianza para lo que se viene más adelante". Esa frase es de Valber Huerta, uno de los puntales del buen inicio de año de la Católica, más allá del desliz de la Copa Chile, eliminado en semifinales vía definición a penales. El plantel de Ariel Holan lidera la competencia y está, junto a Audax Italiano (que tiene un partido menos), invicto.
Lo que está logrando el conjunto estudiantil no es tan lejano en el tiempo. Hace dos años, con otro técnico y un plantel con menos variantes que el actual, hizo algo muy parecido.
En 2018, con Beñat San José, Católica ganó los primeros seis partidos: 2-1 a Deportes Temuco, 1-3 sobre Curicó Unido, 0-1 a Everton, 1-0 a Unión La Calera, 0-1 sobre Deportes Iquique y 3-1 a Unión Española. Esta racha se rompió en la séptima jornada, cuando la UC cayó 1-0 con Colo Colo, en Macul.