Hoy, a las 11 horas, Sebastián Moreno comandará su primer Consejo de Presidentes en su calidad de máxima autoridad del fútbol chileno. Se verá la cara con los timoneles de los 32 clubes, con los que, en algunos casos, mantuvo enormes diferencias por la ajustada elección celebrada para elegir al sucesor de Arturo Salah.

Según cuentan de Quilín, llegó la hora de dejar atrás los enfrentamientos que ensuciaron la victoria del expresidente de Cobresal. Y se hará con equipos nuevos: Santa Cruz, elenco recién ascendido al fútbol profesional, participará por primera vez de la cita. San Marcos de Arica, el último descendido, le dejará su puesto.

La nueva directiva de la ANFP busca dar el primer golpe de entrada. Quieren modificar los estatutos para regular el límite del gasto en el fútbol. Y si bien ya es una idea que ha sido conversada entre los elencos, y a la que todos adhieren, hoy se debiese aprobar mediante una votación.

La idea es que el gasto no supere el 70% de los ingresos generados por cada elenco, considerando el promedio de las últimas tres temporadas, en los ítems remuneraciones de jugadores y cuerpo técnico; pago por préstamo de jugadores; pago de comisiones de agentes de jugadores; amortización de derechos de jugadores y los pagos por la cesión de derechos de imagen de los futbolistas. En caso de que en los estados de resultados auditados de los clubes se supere dicho porcentaje, se podrá corregir dicho exceso hasta en 25% del total con aportes de capital de los máximos accionistas.

La sanción por el incumplimiento de la nueva norma será ejemplar, al más puro estilo del fútbol europeo. En caso de que algún equipo no respete el reglamento, será sancionado con la prohibición absoluta de inscribir nuevos fichajes en el registro de jugadores en la siguiente temporada. No se aplicará el castigo para los futbolistas de las inferiores de cada elenco o que terminen el período de préstamo en otra institución.

La fiscalizadora

La encargada de supervisar cada movimiento de los 32 equipos será la Unidad de Control Financiero, cuya estructuración sufrirá un cambio solicitado por los propios clubes. La empresa auditora Deloitte, la misma que realizó la investigación luego de la salida de Sergio Jadue, llevará de manera externa los registros de Quilín. Este órgano tendrá un plazo fatal de 30 días hábiles para denunciar al Tribunal de Disciplina de la ANFP cualquier incumplimiento a las obligaciones establecidas.

Otro de los puntos que se tocará en el consejo de hoy será la designación de tres representantes de los equipos para componer una mesa de trabajo con el Servicio de Impuestos Internos. Semanas atrás, desde Quilín firmaron un pacto de colaboración con la entidad: "La idea es que los clubes sepamos en detalle los cobros que se realizan, más que nada en relación al IVA. No queremos cometer errores", dicen desde un elenco de Primera División.

Además, se comentará el acuerdo que finalmente se llegó con Barnechea, al que se le devolvió la licencia de clubes para disputar el campeonato de Primera B.