Universidad Católica aprovechó el receso por la fecha FIFA para tener un apretón de nivel internacional. Cruzó la cordillera para tener un amistoso con River Plate, el último campeón de la Primera División argentina. En el estadio Único de San Nicolás, los cruzados cayeron por 1-0 ante uno de los colosos del continente. Hoy diezmado, pero un coloso a fin de cuentas.
Entre las bajas por lesión y los convocados a la Selección, Nicolás Núñez debió armar un equipo medianamente competitivo con los que tenía disponibles. En ese sentido, fueron titulares los jóvenes Jorge Ortiz y Francisco Rossel, apoyando en ofensiva a Gonzalo Tapia y Fernando Zampedri. Pero la principal novedad de la UC estuvo en el arco. Este choque ante los Millonarios sirvió para el debut en el primer equipo del meta juvenil Thomas Gillier, quien quedó como el segundo portero tras la salida de Matías Dituro. El jugador estuvo una hora en el partido (lo reemplazó Peranic) y, para ser su estreno, respondió correctamente.
Por su parte, Martín Demichelis dispuso de una mixtura, incluyendo a varios titulares como Milton Casco, Enzo Pérez, Nacho Fernández, Esequiel Barco y Miguel Borja. El chileno Paulo Díaz comenzó en la banca e ingresó en el segundo tiempo. El ex Palestino se había quedado fuera de la Selección producto de una lesión.
Durante todo el partido, fue River el que controló la pelota. La UC, al no tener un nexo entre el mediocampo y los delanteros, se saltaba líneas, aspirando a tener un ataque directo, lo que resultó a cuentagotas. El perjudicado con esto es Zampedri, poco asistido. La más nítida que tuvo el Toro fue en los 25′, con un cabezazo débil. La mejor opción de los chilenos fue en los 35′, con un testazo de Kagelmacher que salió elevado del arco riverplatense.
En el primer tiempo, Católica sufrió por su franja derecha, porque los ataques ‘millonarios’ se volcaron por esa banda, con las pasadas de Casco y la habilidad de Barco. Daniel González, el improvisado lateral diestro, sufrió. Antes del descanso, River rondó la apertura de la cuenta, pero el colombiano Borja no dio con la portería. En los 44′ desvió un remate que pasó cerca de uno de los postes protegidos por Gillier.
Ofensivamente hablando, la UC hizo poco. Nada con un real peligro para el área de Centurión. En el complemento, un tiro libre de Rovira en los 52′ se fue por arriba del arco. Y no mucho más. Si uno de los dos merecía ponerse en ventaja era River. El 1-0 llegó en los 53′, con gol de Barco. El ex Independiente se perfila para su diestra, desde la izquierda, y saca un remate bajo al primer palo de Gillier. Mediante una acción individual, los argentinos quebraron la resistencia cruzada.
Pese a la desventaja, Católica no cambió de ritmo. Más bien, Núñez usó el encuentro como un banco de pruebas y a utilizar a jugadores que no habían tenido presencia. Llamó la atención el ingreso de Nehuén Paz, quien no está inscrito en el Campeonato Nacional (es el “último” extranjero del plantel) y no pudo salir del equipo en busca de regularidad. A 10′ del final se dio otro debut, el del joven delantero estadounidense de raíces africanas Ousman Touray.
River fue mejor y se quedó con la victoria por la cuenta mínima. De todas maneras, el encuentro no deja tantas claridades. La UC vuelve al país para pensar en la reanudación de la competencia local.