Colo Colo vuelve a los cuartos de final de la Copa Libertadores tras vencer a Junior en Barranquilla. El Cacique se mete dentro de los ocho mejores del continente por primera vez en seis años y obtiene el primer triunfo de su historia en Colombia.

El conjunto albo sorteó a un complejo rival gracias a las anotaciones de Lucas Cepeda y Maximiliano Falcón. Ahora, sueña con hacer historia en el certamen continental tras un encuentro correctísimo.

Colo Colo no sufrió mayoritariamente. Fue un partido ordenado, con pequeños errores puntuales. El trámite fue tranquilo. De hecho, los ánimos se calentaron recién en el cierre, aunque también hubo amenazas en el complemento. En cambio, tras el pitazo final, se desató la calentura de los futbolistas colombianos. El plantel de Junior se lanzó contra un colocolino en específico: Arturo Vidal.

La molestia de los jugadores de Junior

Vidal se había encargado de calentar el partido en la previa. En el hotelazo realizado por los fanáticos albos en el hotel Hilton, lugar de concentración del equipo, el Rey se llevó los focos. Ahí protagonizó un registro que rápidamente se masificó.

El volante subió a sus redes sociales una arenga para despejar las dudas en torno a sus condiciones físicas y aprovechar de enviar un potente mensaje contra los blanquirrojos. “Estoy listo para jugar. Vamos a masacrar. Vamos a dejar la vida en la cancha”, señaló en una transmisión de Instagram.

Esto mismo recordaron los jugadores de Junior después del final del encuentro. Mientras Vidal celebraba eufóricamente la victoria y se dirigía a la zona donde se encontraba la parcialidad alba, los cafetaleros fueron a buscarlo.

Esto se había anticipado desde el ingreso del Rey a la cancha. Emanuel Olivera lo fue a buscar desde que saltó al terreno de juego, pero todo se acrecentó tras el pitazo. Ahí, los jugadores colombianos lo encararon y cuestionaron su accionar en la previa. Lo increparon y le hicieron gestos de que “habló mucho”. También tuvo un entrevero con Yairo Moreno y Carlos Bacca. El oriundo de San Joaquín, fiel a su estilo, tampoco se achicó y devolvió las reprimendas, pero todo quedó ahí.

El tumulto se fue agrandando y comenzó una pequeña gresca, que rápidamente fue disuadida. Los jugadores albos intentaron bajarle el perfil y sacar a Vidal del lugar. Después, continuaron con sus festejos junto a los forofos que llegaron al Metropolitano Roberto Meléndez para presenciar el primer triunfo del club en Colombia.