El tiempo apremia en Colo Colo. Pese a que el objetivo de la estrella 33 está muy cerca de concretarse, no faltan los problemas, sobre todo, en la mantención del plantel para la próxima temporada. Así ocurre, por ejemplo, con el capitán Gabriel Suazo, quien termina contrato en diciembre con los albos.
Pese a que las conversaciones entre el jugador y el club se han multiplicado en los últimos días, lo cierto es que el lateral izquierdo todavía no llega a acuerdo para con sellar la extensión de su vínculo con el cuadro de Macul.
En la última ventana de mercado, el seleccionado nacional estuvo cerca de marcharse del club, pero la ansiada oferta del fútbol europeo nunca llegó, lo que obligó al futbolista a quedarse en la institución que lo formó.
“Estamos tratando el tema con el representante de Suazo, pero todavía no llegamos a un acuerdo. Todavía estamos conversando. Sabemos que el jugador quiere partir, pero no a cualquier destino”, dicen en el Monumental.
Jugador libre
En estos momentos, el capitán del equipo está en condiciones de negociar como agente libre con cualquier otra institución, de acuerdo con lo que dice el estatuto del jugador de la FIFA.
La regla establece que todo futbolista al que le resten menos de seis meses de contrato con un club está en su pleno derecho de llegar a un acuerdo con otro equipo, al cual podrá integrarse después de que termine su vínculo anterior.
Una situación similar a la que ocurrió con Iván Morales. En enero pasado, el delantero se marchó a Cruz Azul, justo un semestre antes del final de su vínculo con el club albo. Sin embargo, su traspaso a México de todas maneras dejó dinero en las finanzas del club chileno.
Esa, precisamente, es una de las ambivalencias con las que juega Colo Colo en estas conversaciones. Por un lado, está el deseo del lateral de marcharse a Europa. Aunque por el otro, si ese ofrecimiento fuera concreto, el deportista ya habría informado en Pedrero de su partida.
La intención del zaguero es llegar a acuerdo con el Cacique, pero siempre con la idea futura de marcharse al Viejo Continente. Para eso, el objetivo por el lado del atleta es negociar una cláusula de salida más bien baja, para que no sea un impedimento ante posibles interesados.
A menos de dos meses del final del compromiso, en el equipo blanco trabaja intensamente para lograr ese acuerdo. Seguramente, en los próximos días debería salir humo blanco desde las oficinas de Blanco y Negro.