La descompensación del volante chileno Javier Altamirano, en el partido entre su equipo Estudiantes y Boca Juniors en La Plata del domingo 18, aún genera conmoción en el fútbol argentino.
Tanto en el desarrollo del partido en cuestión, como en la salud del exjugador de Huachipato, quien según el último parte médico del equipo pincharrata no tenía “antecedentes de epilepsia”.
“Luego de los estudios realizados en el día de hoy, se determinó que la causa de la convulsión sufrida por el jugador fue una trombosis del seno longitudinal superior (cerebro). El jugador continúa bajo cuidados intensivos. Se encuentra estable, alerta, tranquilo, con parámetros normales de acuerdo con su patología y tratamiento medicamentoso que recibe”, estableció el club transandino.
Sin embargo, la abrupta salida en ambulancia del mediocampista generó una verdadera conmoción dentro de la cancha. Una serie de malentendidos con fuertes reacciones del público en el recinto platense.
Uno de los cuestionamientos que más polvo levantó fue la reacción contra el delantero uruguayo Edinson Cavani, quien pidió silencio en el incómodo momento que vivió Altamirano, situación que despertó las duras críticas de los hinchas locales.
El diálogo de Cavani
Mientras la ambulancia salía del campo de juego, el grito general en las tribunas era “¡Uruguayo botón, sos un hijo de…!”. Una dura reacción, ya que los fanáticos de Estudiantes creían que el capitán de Boca había impulsado que los jugadores se mantuvieran en la cancha.
En medio del incidente, las cámaras de ESPN captaron la reacción del atacante uruguayo. Uno de los primeros que se acercó al equipo de Estudiantes para calmar al público.
Momentos de incertidumbre, sobre todo cuando el árbitro Fernando Echenique le pidió a los capitanes de ambos equipos una reunión. Allí fue cuando reapareció Cavani y se cruzó con el DT de Estudiantes, Eduardo Domínguez.
“Queríamos alejarnos porque el chico la estaba pasando mal y ellos gritando y puteando”, le dice el número 10 de los xeneizes al técnico platense, como se escucha en la cámara exclusiva, cuando hacía callar a los simpatizantes locales.
Tras la escena, el charrúa se reúne con el jugador del rival José Sosa y con el juez junto a sus colaboradores y los entrenadores de los dos conjuntos.
“Ahora vamos a hablar todos juntos, pero por lo menos metámonos adentro para charlar entre todos porque, sino quedan mal ellos”, reflexiona el volante pincharrata, dándole a entender al árbitro que lo mejor era hablar en privado para que el público local no crea que los jugadores de Boca esperaban la reanudación.
En el cuadro siguiente se reúnen los representantes de cada equipo. Por el lado de Boca fueron el uruguayo y el técnico Diego Martínez, mientras que en el local se acercaron José Sosa y Eduardo Domínguez.
Entonces, el publicó insultó al capitán xeneize. “Cavani, hijo de…”. Fue ahí cuando Martínez consulta sobre el estado de Altamirano. “¿El chico está bien?, preguntó el ex DT de Tigre y Huracán. “Está estable”, respondió Echenique.
Fue ahí cuando Cavani retomó la palabra: “ya está entonces”, mientras el juez le contesta que hay que esperar la palabra de Sosa. “Estamos ahí esperando, está la mujer con el nenito…”, advierte el volante albirrojo con la clara intención de no querer seguir con la disputa del partido.
“Primero el pibe”, responde el árbitro. Entonces, los dos capitanes se saludan antes de que ambos planteles se vayan al camarín y que el árbitro marque la suspensión del duelo.