Como toda una estrella de rock, Joaquín asiste a la Feria de Abril en Sevilla. En la plaza de toros de la Maestranza, el capitán del Real Betis recibe diversas felicitaciones, entre ellas, la de Antonio Ferrera, un conocido torero español, quien mete al futbolista en lío grande, al pedirle que salte al ruedo para recibir un brindis. Algo a lo que el futbolista accede tras un rato de negación.
En primera instancia, el ídolo bético se hace el desentendido. Sabe que podría traerle consecuencias. Pero Ferrera es insistente. “Que pegues un salto, te pago yo la multa. Venga, vamos. Tú eres torero y tienes que pisar el albero...”, repite y los espectadores presentes incitan al jugador a ceder.
La ley en materia de espectáculos taurinos es clara en España. Las infracciones leves reciben multas de 30 a 150 euros, mientras que las graves, de 150 a 60 mil euros. Joaquín continúo con la negativa en primera instancia. Está prohibido que entre al ruedo alguien que no participe del festejo.
Sin embargo, apoyado por el público, el jugador termina saltando la barrera. Los dos alguacilillos —empleado que transmiten las órdenes del presidente—, se acercaron al futbolista y le recordaron que su acción no es permitida.
Finalmente, todo concluyó con Joaquín en el ruedo, brindado con Ferrera y fundiéndose en un abrazo con el torero. No obstante, las consecuencias de su decisión recién se están conociendo este domingo.
José Luque Teruel, presidente de la plaza, contó al diario El País, que tanto Joaquín como Antonio Ferrera serán propuestos para sanción por desacato a la autoridad. Dice que aún no se ha redactado el acta del festejo, y que la gravedad de los hechos lo determinará en una reunión con el delegado del gobierno.
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