Rafael Nadal no sólo es uno de los mejores tenistas de la historia. También es un fanático del fútbol. Y más aún del Real Madrid. En esas últimas dos condiciones, el manacorí emitió declaraciones que trascienden su rol de especialista en la raqueta y que, en definitiva, constituyen una defensa a los árbitros de balompié, objeto de fuertes críticas en las últimas semanas, particularmente por sus desempeños en los partidos que involucran a los merengues.
"No me corresponde hablar de árbitros. Pobre ya tendrá el árbitro con todo lo que hablais de él durante horas y horas. No voy a sumarme yo a ese show. ¿Sabes cuál es el problema, a mi entender, que si el lunes hubiera un jurado que revisara todas las acciones del partido y se sancionaran post partido pues quizás los árbitros tendrían un faena un poquito más sencilla, porque estamos hablando de un deporte del que soy el más apasionado. Miro mil partidos. Pero lo que pasa es que los árbitros lo tienen muy complicado, porque muchas veces hay jugadores que intentan engañar demasiado a los árbitros y se hace muy complicado arbitrar. Si se arbitrara el lunes y la gente que hace trampa, se tira, se pega se sancionara este show se terminaría, pero parece que no hay interés en querer hacerlo", reflexionó a propósito de las críticas al desempeño referil en el clásico español entre el Barcelona y el Real Madrid.
La postura del tenista encontró respuesta en la asociación de árbitros españoles. "Se puede decir más alto, pero no más claro. Top,top", responden desde la organización. Agregan aplausos y el hashtag #respect
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