"En esa época, Christian estaba jugando a un nivel más alto que el 90% de todos los juniors. La final contra Zverev fue extremadamente fácil". Así recuerda el extenista Guillermo Núñez la jornada del 8 de junio de 2013, el día que Christian Garin (22) se quedó con el título juvenil de Roland Garros.
El rival es el mismo que enfrentará mañana en los cuartos de final del ATP 250 de Múnich: el alemán Alexander Zverev, de 21 años, número tres del mundo y ganador de 10 títulos, entre ellos, tres Masters 1.000 y el Torneo de Maestros de Londres. El chileno ganó esa vez por 6-4 y 6-1.
Sascha explotó rápido en el profesionalismo, mientras que el Tanque debió hacer un camino más largo. Recién este año ingresó de lleno a los torneos ATP, con un rendimiento espectacular que hoy lo tiene entre los mejores arcilleros de la temporada.
Garin, dirigido en esa época por Martín Rodríguez, hoy coach de Nicolás Jarry, derrotó a varios jugadores que hoy destacan en el circuito, como el croata Borna Coric, el serbio Laslo Djere y el británico Cameron Norrie.
"Christian llegaba a Roland Garros con chances de ganarlo. Tuvo un partido muy duro con Djere. Y si yo le ganaba a Coric, jugábamos en semifinales", recuerda Núñez, quien llegó a cuartos de final en París, venciendo a jugadores que también brillan hoy, como el caso del ruso Karen Khachanov, segundo cabeza de serie en Múnich. Y añade: "Fui a ver la final y la ganó fácil. Físicamente estaba muy bien".
Garin llegaba con el impulso de haber debutado en el ATP de Viña venciendo a Dusan Lajovic y sacándole un set al francés Jérémy Chardy, en ese momento 26 del mundo. Esa actuación le permitió ser fichado por el clan Nadal, una experiencia que no terminaría muy bien.
El paso por la capital francesa también incluyó la final de dobles, junto a Nicolás Jarry. "Lo que hicieron Christian, Nico y Guillermo fue un orgullo para el tenis chileno", resalta Carlos Marchant, DT de Núñez en París.
Guille cree que Garin tiene muchas chances . "Está con la confianza. Va a entrar a jugar sin presión, como lo ha venido haciendo en los últimos partidos. Zverev es el que tiene mejor ranking, ganó los dos últimos años y lleva toda la presión. No hay nada que perder", sostiene.
El Tanque palpita el partido de mañana. "Es una situación totalmente distinta, han pasado muchos años. La verdad es que hace un par de semanas dije que quería empezar a jugar contra los top. Estoy jugando bien, son partidos que me gusta jugar. Estoy mejorando mucho el ranking últimamente, pero me venía faltando quizás jugar partidos contra gente así. Me hace mucha ilusión, él juega de local aquí", dijo a ADN.
Y Zverev no lo olvida: "Garin es un jugador formidable, que ya me ha conseguido ganar en el pasado, siendo juveniles. Está jugando a un gran nivel en tierra y tengo claro que voy a tener que dar lo mejor de mí para poder conseguir la victoria. Hablaré con mi cuerpo técnico para conocer qué virtudes y qué defectos tiene y saber por dónde puedo atacarle".