En el inicio de la temporada 24/25 de la NBA, Los Angeles Lakers comenzaron su campaña con un sólido triunfo ante los Minnesota Timberwolves, uno de los grandes aspirantes en la Conferencia Oeste. Por otro lado, en un partido que se definió en una infartante prórroga, los Phoenix Suns derrotaron a Los Angeles Clippers. Ahora, era el turno de que ambos vencedores en la jornada inaugural se enfrentaran en el Crypto.com Arena con la intención de mantener el buen ritmo.

La expectación que rodeaba al compromiso era alta, principalmente porque se veían las caras LeBron James y Kevin Durant, dos de la máximas figuras de la liga en este siglo. En esa línea, el choque partió generando chispas.

Al cabo del primer cuarto, los angelinos perdían por un abultado marcador de 38-23 con apenas dos puntos de LeBron y un pobre 25% de acierto en sus tiros; mientras que en el cuadro de Arizona KD y Booker se repartían siete y 10 unidades, respectivamente.

Al inicio del segundo periodo, el dominio de los visitantes aumentó. Tras un nueva remetida de la mencionada dupla, los Suns elevaron su ventaja de 15 a 22 puntos, sembrando las dudas del conjunto oro y púrpura. Sin embargo, en ese momento, el resurgimiento de Anthony Davis fue clave para aclarar el panorama.

La “Ceja” encontró tiros abiertos y, sacando provecho de su portentoso físico, cambió las rotaciones en defensa y alteró el esquema del plantel entrenado por Mike Budenholzer. De esta manera, el alá pívot estrechó el tablero a un déficit de tan solo nueve cifras para irse a los vestuarios.

Anthony Davis posteando a Kevin Durant. Foto: Jonathan Hui-Imagn Images

En el regreso, los angelinos dieron cuenta de su mejoría y ratificaron que triunfo sobre los Timberwolves no había sido casualidad. Con una asociación magistral de Davis y James, en la que ambos sumaron 20 y 17 puntos más a su hoja de anotación, respectivamente, los Lakers pasaron adelante y no soltaron la ventaja hasta el bocinazo final, dejando sin efecto las 30 unidades de Durant.

Así, en Los Ángeles celebraron la remontada y el récord de 2-0, marca inaugural a la que llegan por primera vez desde el curso 2009-10, instancia en la que salieron campeones gracias al tándem conformado por Kobe Bryant y Pau Gasol.

En la próxima presentación, en tanto, los Lakers cerrarán su estancia como locales ante los Sacramento Kings, para luego iniciar una gira de cinco partidos como forasteros. En dicho recorrido fuera de casa se medirán ante los Phoenix Suns, Cleveland Cavaliers, Toronto Raptors, Detroit Pistons y Memphis Grizzlies.