Rodrigo Abadie, agente de Hernán Galíndez, aterriza este jueves en Chile. Apenas llegue, el argentino tomará un taxi que lo lleve a las oficinas del Centro Deportivo Azul para reunirse con la gerencia de Azul Azul. Sabe que el futbolista que representa no lo está pasando bien en el país. Según reveló El Deportivo este miércoles, el meta argentino nacionalizado ecuatoriano acusa hostigamiento en las redes sociales a raíz del caso Byron Castillo, que toca al golero en su calidad de seleccionado ecuatoriano.
“Estoy por salir a Chile para solucionar este tema. Es lo que me corresponde a mí y al club. Nadie tiene claro el tema porque es algo atípico, algo que nunca había sucedido. Acá no hay ofertas, no hay negocio, no hay nada. Si Hernán debe volver a Ecuador, lo hará por la mitad de lo que gana en Chile. Es un tema de vivir en paz, y eso no le pasa a la familia de Hernán hace tres meses. Fue con una tremenda ilusión a un club enorme y le está pasando esto. Es doloroso”, dice el representante a El Deportivo.
Galíndez está incómodo. Se lo hizo saber al club, con el que tiene contrato hasta diciembre de 2023. Le comunicó a la institución que su familia ya decidió dejar Chile. Y, según información recabada por este medio, el futbolista también expresó su deseo de partir de la institución. Abadie, en conversación con El Deportivo, relata los duros meses que ha debido enfrentar el seleccionado ecuatoriano. Y entrega su versión:
“Hernán no pidió irse del club. Hernán transmitió al club su problema familiar que ya es reincidente en relación a las amenazas a la familia. Si insultan al jugador, no hay problema. Eso se puede debatir y todo. Ya cuando se meten con la familia... Acá hubo amenazas graves, pero graves. Eso se trasladó al club. Ahora esto ya es reincidente. No puede ir ni al supermercado, le dicen barbaridades en todos lados. Le dicen cosas a la familia, le escriben, hay catarata de insultos. Hay prueba de todo. Él transmitió que la familia se va de Chile y el problema familiar que tiene. No dijo que quería irse de Chile. Para Hernán es un honor atajar ahí. Tendría que estar disfrutando, pero si uno no disfruta, no está bueno. Y si la familia se va, está claro que disfrutará mucho menos”, dice el argentino, a minutos de embarcarse en Buenos Aires. Hace un mes, en la primera oportunidad en la que el futbolista acusó hostigamiento, el guardameta recibió apoyo hasta del Sindicato de Futbolistas Profesionales (Sifup). El club, en tanto, prometió elevar las amenazas a la justicia.
El golero siempre ha tomado una posición clara en el conflicto que involucra a Castillo. Hoy, al parecer, sus palabras le están pasando la cuenta: “Entiendo que la FIFA al recibir una denuncia, está bien que pida documentación. Es normal. Sé que Byron es ecuatoriano y no tengo dudas de eso. Clasificamos en la fecha 17 al Mundial y ahora, si Chile entiende que tiene que hacer una denuncia, está en su derecho”, declaró. “Justo me toca jugar a mí en Chile, el único ecuatoriano que está acá... No puedo ni ir al supermercado porque la gente me habla de esto. Está bien que los abogados defiendan su postura”, expresó, en relación al hostigamiento que su apoderado también pone en evidencia.
En órbita
El agente explica la incomodidad del golero. “Hasta la U está perjudicada. Porque si con un fracaso que no tiene que ver la U, Hernán, ni Ecuador, ni la familia de Hernán, la gente va a estar discriminándolo porque es ecuatoriano y porque Chile no fue al Mundial, estamos todos locos. No se justifica nada. Esto ya tocó un techo, están con miedo de lo que pasó la otra vez. Vivir así no está bueno. El jugador transmitió el problema familiar que tiene que es reincidente. No debe ser gracioso para la U que su arquero extranjero lo están maltratando por todos lados por un tema que no tiene nada que ver la U tampoco. El jugador está preparado para el insulto, porque el jugador juega al fútbol hace 20 años y está acostumbrado a eso. Es mundialista, de Selección. Eso no molesta, pero cuando tocan a la familia, la familia es más vulnerable y no tolera ciertas cosas...listo”, dice, de manera tajante.
El incierto futuro de Hernán Galíndez lo ha puesto en la órbita de diferentes clubes. Aucas, equipo que milita en la Primera División de Ecuador, lo quiere en sus filas. ¿Qué sucederá con el portero? “No te puedo dar una respuesta de lo que va a suceder porque es algo atípico. Sí me causa gracia que digan que hay una oferta. Si hubiese una oferta sería lindo, porque te diría cuánto dinero le toca a la U, de cuánto es el negocio. Pero acá no hay un negocio. Hace un mes le estoy comunicando al club que la familia se va, que no aguanta más, ahora está peor que nunca por lo que pasó. Pero si el jugador se tiene que quedar, se queda. Tiene contrato. Lo que voy a hacer yo es buscan un plan B para solucionar el problema. Y ahí apareció lo de Aucas. No es que exista una oferta, o un negocio. Lo que acá existe es que si la familia de Hernán se va y la U entiende la situación, y lo mejor es que Hernán se vaya, está la posibilidad de ir a Aucas. Ahora, que Aucas haga una oferta a la U de Chile, no, no, imposible. Si es un negocio tendría que ser Arabia Saudita, México, la MLS. Lo llevaría a un mercado que haga un resarcimiento económico importante y como corresponde a la U. Y que ahí Hernán decida. Acá es todo al revés. Yo como representante estoy tratando de solucionar un tema que nunca me sucedió”, cierra.