Reunión de emergencia en La Moneda: la vuelta de la U al Estadio Nacional corre riesgo por nuevas condiciones en el plan de seguridad

En Universidad de Chile están expectantes. La vuelta al Estadio Nacional, que viene siendo trabajada desde noviembre del año pasado, corre riesgo. Porque si bien los azules se ilusionan con la posibilidad de recibir a Cobresal en el reducto ñuñoíno, todo quedó en duda frente a las últimas solicitudes de las autoridades encargadas de aprobar el cotejo.

A esta hora, en La Moneda, se lleva adelante una reunión clave. El subsecretario del Interior Manuel Monsalve, Estadio Seguro, la Delegación Presidencial y Carabineros analizan la realización del encuentro frente a los últimos hechos en la Supercopa de la vergüenza.

El martes, a las 10.30 horas, se definió el plan de seguridad para llevar adelante el partido. En una cita que contempló la participación del IND, la Delegación Presidencial, Estadio Seguro, personeros de la Municipalidad de Ñuñoa, Carabineros y Azul Azul se acordaron las reglas para llevar adelante el cotejo. Un aforo de 32 mil personas, y no los 45 mil que permite el Nacional, 400 guardias privados fueron algunos de los puntos acordados entre los presentes.

“Nos reunimos con distintas autoridades, con la Delegación Presidencial, Estadio Seguro, IND, Carabineros, Metro y con la Municipalidad de Ñuñoa y estamos tranquilos para lo que va a ser el partido del día domingo. Hemos trabajado en una operación de seguridad importante, con nuevas medidas y esperamos que este domingo tengamos una fiesta en el retorno de nuestro equipo al Estadio Nacional (...). Es así como vamos a tener 400 guardias, la apertura de puertas será tres horas antes, y habrá accesos por todas las calles aledañas al Estadio”, expresó Ignacio Asenjo, gerente general de Azul Azul.

“Hoy se nos informó que el aforo para este partido será de 32.000 personas, los lamentables hechos de la Quinta Región hacen que mucho contingente policial de la Quinta Región y de la Región Metropolitana todavía estén ocupados de esos temas, así que por ahora tendremos un aforo de 32.000 personas. Esperamos que el buen comportamiento y la organización que preparamos para este partido nos permita ir aumentando el aforo en los partidos siguientes”, complementó el funcionario de la sede de la concesionaria.

Lo cierto es que uno de las preocupaciones de la U fue resguardar el Memorial de los Detenidos Desaparecidos tras los destrozos que se produjeron en el partido entre Colo Colo y Huachipato, válido por la Supercopa. El duelo acabó suspendido, con hinchas que saltaron desde las tribunas y un sector del recinto quemado. Los daños se estimaron en más de 100 millones de pesos. Por lo mismo, se acordó liberar esa zona del público, permitiendo solo el ingreso de los fanáticos a los codos aledaños. La idea del club es evitar cualquier tipo de incidente que pueda poner en riesgo la localía para el resto de la temporada.

Durante las últimas horas, sin embargo, las peticiones de las autoridades se fueron acrecentando. Este miércoles por la tarde, pese a tener el plan de seguridad aprobado, las autoridades solicitaron, entre otros puntos, que la galería norte fuese cerrada de manera completa. ¿El motivo? Tal como ocurrió en la Supercopa, volvieron a acusar falta de dotación para poder cubrir el evento. Además, está latente los graves hechos que ocurrieron en el duelo entre Colo Colo y Huachipato. Desde Carabineros repiten que no están las condiciones para llevar adelante el encuentro.

Lo cierto es que en Azul Azul no escondieron su sorpresa. Más cuando las 32 mil entradas puestas a disposición de los hinchas están prácticamente agotadas. Cerrar la galería norte significaría una reducción considerable de público, considerando que caben casi 15 mil fanáticos en toda esa zona.

Luego del encuentro, que finalizó pasadas las 18.00, se comprometió un informe de Estadio Seguro, que está en proceso de redacción, y que se suma al que entregó Carabineros. Con esos documentos, la Delegación Presidencial decidirá cuál será el destino del encuentro entre azules y mineros.

Al término de la cita, Pamela Venegas, jefa de Estadio Seguro, fue la única autoridad que habló con los medios, aunque de forma muy escueta. “Fue una reunión donde recibimos la opinión técnica de Carabineros, a través de un informe, y nosotros ahora vamos a redactar nuestras recomendaciones para la Delegación Presidencial Metropolitana, que es quien toma las decisiones”, indicó, sin dar luces de si son partidarios de postergar el encuentro.

A casi 72 horas del encuentro, la vuelta de la U al Nacional está en duda. Las próximas horas, que estarán marcadas por las reuniones entre los actores involucrados, terminarán siendo decisivas para conocer el futuro del partido más esperado del último tiempo por los fanáticos estudiantiles.