Ricardo Pini no esconde su alegría. Con su hermano Sebastián no sueltan nunca la camiseta de Unión La Calera. Ha dormido poco. Llegó a Santiago este viernes a las 4 de la madrugada, luego de celebrar con el plantel el ascenso a Primera División que, además, sepultó a Santiago Wanderers. El principal interlocutor es Ricardo, pero Sebastián también toma a ratos la palabra.
Hoy, Ricardo decide hablar. No le gustan las entrevistas, pero ahora repasa la campaña y los juicios que muchas veces se le han hecho.
¿Cómo vivió la tanda de penales?
Fue un milagro, lo vivimos con mucha tensión. Lo considero un milagro deportivo, una epopeya en ese sentido. Era muy difícil: el equipo jugó, realmente, 19 finales. Ante Wanderers fue la coronación de un gran trabajo.
¿En el camarín no lo creían?
Para mí no se daban cuenta del milagro que habían logrado. Les dije que esto fue un milagro, que les agradecía por el compromiso y que se iban a dar cuenta en un tiempo después lo que habían conseguido.
¿El objetivo era no descender?
Sí, el objetivo de esta temporada era no descender. No era fácil tampoco, porque debíamos remontar 12 puntos.
¿Siente que alguna vez quisieron perjudicarlos desde la ANFP?
En algún instante sentimos que había tendencia a perjudicarnos.
¿Por sólo llamarse La Calera?
Tiene que ver con eso directamente, porque el club estaba vinculado a Sergio Jadue. En Rangers, durante los cuatro años que estuvimos, jamás se nos dio un peso. Y eso está en los registros. Jamás la ANFP nos ha dado nada. La asociación con Jadue no sé de dónde ha venido, pero nos ha hecho mucho daño. Es difícil llamarse La Calera por la gestión anterior, porque tiene a un dirigente como Jadue confesando delitos y que probablemente nunca más pueda desempeñar cargos en el fútbol.
¿Qué dificultades se han presentado por ser el ex equipo de Jadue?
SP: Básicamente el desafío de este club se vivió en distintos ámbitos. Se habla de lo deportivo, pero hace dos años y medio tenemos problemas en otros ámbitos; en el económico, en el mediático también. La situación de Jadue implicó que hoy Unión La Calera no tenga un sponsor en su pecho.
¿Pensó vender el club?
En un momento lo vimos todo muy complicado, pero por más que uno pensara en salir, era muy difícil el contexto. No había mercado para el club. Lo que hicimos fue enfocarnos en cómo sacarlo adelante.
¿Tiene alguna relación con Jadue?
Cero relación. Sí tuvimos la relación como presidente de Rangers con un presidente de la ANFP, pero no tenemos nada hoy y tampoco la queremos tener.
¿Jadue les recomendó comprar La Calera cuando era presidente?
Sí, como Harold Mayne-Nicholls nos recomendó comprar Antofagasta, en 2008. En Chile, el primer club que fuimos a ver fue Antofagasta. Lo íbamos a comprar hasta que el presidente contrató 30 jugadores y un técnico. No nos pareció bien que otros tomaran las decisión. Ahí empezamos a ver a Rangers.
¿Por qué invierte en Chile?
Estudiamos las industrias del fútbol en Latinoamérica. La de Chile, a partir de la sociedades anónimas deportivas, era muy atractiva desde todo punto de vista. Con una generación de futbolistas que iba a poner la marca chilena en un lugar muy alto.
¿Por qué comprar La Calera?
SP: Cuando vendemos Rangers empezamos a ver otros mercados. Estuvimos por Escocia, España y México, pero nuestra primera intención fue volver a Chile. Se presentó esta oportunidad por uno de los socios que la propone y nos convoca. Decidimos entrar, pero obviamente con un escenario muy diferente al que se nos prometió.
¿Cómo explica la triangulación de jugadores por la que se le acusa desde que estaba en Rangers?
A nosotros eso nos produjo mucho desgaste en ese momento. Las situaciones que nos indicaban como trianguladores de jugadores y que teníamos los clubes para eso. Esto es una cuestión que es difícil de explicar, pero en la industria del fútbol es una realidad. El modelo de la sociedad anónima, que persigue el lucro, contempla este tipo de situaciones, de generar recursos. Si el club no genera recursos es imposible competir. Hoy compites con clubes que tienen mucho más recursos. Clubes de otra dimensión, que pueden ser Rangers o Unión La Calera, si no generan recursos, siempre dentro de la legalidad y lo que es reglamentario, es difícil que compitan. Es un tema de recursos. Rangers con nosotros estaba en quiebra, a punto de descender a Tercera División. Pudimos comprar un complejo deportivo, pudimos ascender, peleamos una semifinal. Lo sentíamos muy injusto.
SP: Se confunde con las triangulaciones que tienen con el fin ilícito, que puede ser la evasión de impuestos o los derechos de formación. Nosotros jamás utilizamos un club para hacer eso. Nunca tuvimos una observación de SII. Pasamos todas las observaciones. Terminaron asociándonos a una serie de prácticas que nunca estuvimos involucrados.
¿Hoy tiene otro club?
No, hoy no tenemos otro club.
¿Que relación tiene con la ANFP?
Tuvimos un montón de situaciones muy desagradables con esta directiva, que van desde el coeficiente de rendimiento hasta las declaraciones de Hugo Muñoz, quien dijo que estábamos desaparecidos, mientras estábamos en Argentina viendo jugadores. Creo que los dirigentes querían ver una cierta vinculación con Jadue y que, sin indagar demasiado, lo tomaron de esa manera. Políticamente, creyeron que sería bueno que descendiera y desapareciera La Calera. Después de Concepción, venía la Calera. Hoy la relación es protocolar.
¿Cómo evalúa la gestión de Salah?
Tiene luces y sombras. Salah es una persona de una imagen que le venía muy bien al fútbol, pero a nivel gestión hay mucho que mejorar.
¿Salah se vio manchado con el caso facturas?
Si el principal activo de esta directiva era la transparencia, creo que esto les afectó mucho.
¿Lo llamó Salah para felicitarlo?
No, espero que hoy (ayer) lo haga en el Consejo.
¿Le llama la atención que no felicitara?
Sí, pensé que pudo haber algún llamado, pero nada.
