El Gobierno de Río de Janeiro oficializó la candidatura del estadio del Maracaná, uno de los iconos de la ciudad más emblemática de Brasil para albergar la final de la Copa Libertadores de América 2020, informaron este viernes fuentes oficiales.

El alcalde de Río de Janeiro, Wilson Witzel presentó oficialmente la candidatura del Maracaná para el 2020 porque ese año el monumental templo del fútbol cumple 70 años.

La petición fue oficializada ante el presidente electo de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Rogério Caboclo, y al presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), Alejandro Domínguez, en la noche de este jueves en Río durante la ceremonia de sorteo de la fase de grupos de la Copa América.

https://twitter.com/wilsonwitzel/status/1088580239758888961

El Maracaná ya fue sede de la final de la Copa Libertadores de América en tres ediciones desde que se creó el torneo en 1960.

En 1981 albergó las finales entre el Flamengo y el chileno Cobreloa; en 1998 la de Vasco da Gama y el ecuatoriano Barcelona, y en 2008 la de Fluminense y la Liga deportiva Universitaria de Quito.

Este año, en el icónico templo del fútbol se disputará la final de la Copa América.

Para el Mundial de 2014 el estadio pasó por una gran reforma y fue reconstruido desde los cimientos respetando únicamente la fachada, que está protegida como patrimonio nacional.

Construido en 1950, el Maracaná nació con unas dimensiones colosales, cuadruplicaba en capacidad al resto de estadios de Río y podía albergar casi a un 10 % de la población de la entonces capital de Brasil.

Con una capacidad para albergar a 78.838 espectadores, en Brasil sigue siendo conocido como "el mayor del mundo", a pesar de que hace años perdió ese título.