Diez días después de los incidentes que obligaron la postergación (y recalendarización en Madrid) de la final de vuelta de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors, la justicia argentina detuvo al que hasta ahora es el único imputado por la agresión en contra del bus xeneize en las inmediaciones del estadio Monumental de Buenos Aires, el pasado 24 de noviembre.
Luego de su detención, el elenco millonario se pronunció oficialmente sobre el procedimiento policial que terminó con Matías Firpo, socio activo del club, privado de libertad. "A raíz de la agresión sufrida el pasado 24 de noviembre por el micro que trasladaba a los jugadores de Boca Juniors al estadio Monumental, este martes 4 de diciembre el Cuerpo de Investigaciones Judiciales identificó a uno de los agresores y procedió al allanamiento de su domicilio y posterior detención. El club Atlético River Plate informa que, a través de su departamento legal, le abrió un sumario interno y se procedió a la suspensión inmediata del mismo", informó el cuadro de la Banda Sangre en un comunicado.
"A partir de dicho sumario, se elevará el pedido de expulsión como socio de la Institución a Comisión Directiva y a la Asamblea de Representante de Socios", agrega. "Por otro lado, River solicitará a los organismos de seguridad que el agresor sea incluido en el derecho de admisión para concurrir a los estadios de fútbol", cierra.
Todo esto, eso sí, sin perjuicio de las penas que decida la justicia ordinaria transandina para el único detenido por los incidentes que han dado la vuelta al mundo durante las últimas dos semanas.