Roberto Tobar borra a Francisco Gilabert y el cuestionado José Cabero dirigirá la revancha entre Colo Colo y la UC

Los errores que cometió en el partido entre Universidad Católica y Colo Colo le terminaron pasando la cuenta a Francisco Gilabert. El juez, quien no sancionó un notorio penal del golero cruzado Nicolás Peranic sobre el delantero albo Carlos Palacios y que tampoco vio un codazo en el área alba sobre Guillermo Burdisso, desapareció de las designaciones para este fin de semana, que comprende las revanchas en las finales zonales de la Copa Chile.

El juez, quien ya ha sido objeto de cuestionamiento en otras situaciones, como en el complot que le costó la salida de la testera del referato nacional a Javier Castrilli, no fue considerado en ninguna de las funciones inherentes a la actividad. Vale decir, tampoco aparece como cuarto árbitro. En los duelos de la Copa Chile no funciona el VAR, lo que ya le restaba otra posibilidad de participación y, por cierto, de recibir una retribución económica, como contempla la relación entre los jueces y la ANFP.

José Cabero tendrá la responsabilidad de velar por el cumplimiento del reglamento en el estadio Monumental, en la revancha entre albos y cruzados. El recinto albo no le trae buenos recuerdos al juez, quien fue protagonista en uno de los encuentros que se disputó este año en Macul. En mayo, dejó sin sanción una mano de Agustín Bouzat en los últimos minutos del choque entre el Cacique y Audax Italiano que hasta en el camarín albo admitieron como un penal perfectamente sancionable.

La polémica no es la única en la que ha estado involucrado en la actual temporada. En julio, el juez fue motivo de críticas por dejar sin sanción otra ostensible mano en el área, esta vez en el encuentro entre Deportes Santa Cruz y Universidad de Concepción.

En ese compromiso, Eduardo Vilches interceptó con el brazo derecho un balón que cruzaba el área del equipo de la región de O’Higgins cuando el partido estaba en su recta final. La infracción fue evidente. Sin embargo, tal como en Macul, quedó sin sanción. El juez desestimó los reclamos, justificando con gestos que el balón había impactado en el pecho de Vilches. El duelo terminó igualado a un gol, con el evidente perjuicio para los penquistas, quienes luchan por salir de la parte baja de la tabla.