Rodrygo Silva de Goes (19) tiene todas las miradas sobre su juego. Cada regate que realiza en Chile, o anotación que convierte (lleva dos), se replica de inmediato en Brasil y España. El poderoso Real Madrid desembolsó US$ 53 millones y sus hinchas ya se ilusionan con ver desde junio al nuevo Neymar, como le llaman en Europa. Hoy, sin embargo, continúa ligado al Santos de Jorge Sampaoli. Lo cierto, es que el 10 de Brasil está lejos de su mejor nivel. Su Selección cayó ante Chile el miércoles y complicó sus paso al hexagonal. Hoy debe vencer a Bolivia para seguir en la lucha.

Para conversar con La Tercera tampoco tiene problemas. Pese a haber estado por más de dos horas en el camarín, luego de la caída ante Chile, se saca los audífonos para evaluar el difícil momento del Scratch. También para hablar de su futuro.

¿Su balance de la derrota ante Chile?

Fue un partido muy complicado, en el cual sabíamos las dificultades que nos íbamos a encontrar. Era un partido en el que ellos se jugaban la vida. Estamos tristes por la derrota.

¿Cómo recuerda la triple atajada de Luis Ureta?

Fue una atajada muy buena del portero chileno. Estaba bien atento, y para él fue muy bueno. Era una jugada difícil para un arquero.

Ahora viene Bolivia, un duelo clave para avanzar.

También será un partido muy difícil por toda lo que significará. Son dos selecciones que nos jugamos el paso a la siguiente ronda. Solo tenemos que enfocarnos en conseguir la clasificación.

No se le ha visto en su mejor nivel. ¿Le presiona ser nuevo jugador del Real Madrid?

No me presiona ir al Madrid, solo me motiva. Tener un futuro en el Real Madrid no me puede presionar.

En el Santos, equipo en el que permanece a préstamo, ya está Jorge Sampaoli. ¿Qué le parece como técnico?

Me parece muy bien, es un gran entrenador. Trabaja muy bien por lo que he conversado con mis compañeros. Me han dado muy buenas referencias.