La vida de Roger Federer ha cambiado mucho en el último año. El suizo en estos 12 meses pasó de jugar de los cuartos de final de Wimbledon a quedar sin puntos ATP. Todo por culpa de una rebelde lesión en la rodilla que no le ha permitido recuperarse para volver a jugar de forma profesional. Fue en este escenario, que el suizo dio una entrevista donde habló de su presente y sus sensaciones de cara a un posible retiro.
“El tenis es parte de mi vida, pero no toda mi identidad. Quiero ser y seguir siendo exitoso, poner toda mi energía en los negocios, aunque en ocasiones doy mucho más de lo que debería, pero esto también se puede llevar a cabo fuera del deporte. Sé que una carrera profesional no puede durar para siempre y eso está bien, lo acepto”, confesó Rog al medio neerlandés Algemeen Dagblad.
Sobre esa línea, explicó que lo que definirá su retiro será la capacidad de ser competitivo una vez que vuelva al circuito. “Me encanta ganar pero, si ya no eres competitivo, entonces es mejor parar. No creo que necesite el tenis, soy feliz con las pequeñas cosas, como cuando mi hijo hace algo bien o cuando mi hija obtiene una buena nota en el colegio”, agregó.
Pero una de las cosas que más llamó del reportaje publicado esta mañana fue, la honestidad con la que habló de la pausa de un año que lleva del circuito. Lejos de lamentarse, Federer se mostró agradecido del tiempo que ha tenido para vivir más allá del calendario ATP. “Me dio la oportunidad de ordenar de manera selectiva mis viajes y devolver algo a la gente. Muchos amigos siempre venían a verme, ahora soy yo el que he podido ir y visitarlos. Los viajes en el tenis a veces son excesivos, sobre todo si tienes que organizarlos con niños. Es bonito descansar ahora de todo eso, también para ellos, aunque echan de menos viajar”, lanzó.
Finalmente fue consultado por su ausencia del grand slam británico (el cual conquistó Djokovic) y el suizo no pudo evitar confesar que fue algo especial no estar en el All Englad Club por primera vez desde su debut en el césped inglés. “Fue una sensación muy extraña no jugar Wimbledon este año, verlo por televisión. Al final, soy una persona que ha estado aquí desde 1998″, aclaró.
Por ahora el ganador de 20 grandes tiene planificado reaparecer para la Laver Cup, torneo que enfrenta a los mejores jugadores de Europa ante una selección del Resto del Mundo y en donde será compañero de Rafael Nadal y Andy Murray. Tras aquel evento (que no entrega puntos para el ranking) espera poder jugar el ATP 500 de Basilea, certamen que ha ganado 10 veces y que se desarrolla en su ciudad natal.