"El partido inició muy bien, incluso con acciones alternas de los dos seleccionados. Chile buscando hacer un buen juego, una propuesta", comenzó diciendo Reinaldo Rueda en conferencia de prensa después de la caída de Chile ante Argentina. Todo normal. Eso, hasta que el descontrol entró rápidamente en los jugadores chilenos. Para Rueda: "El pecado fue ilusionarnos".
"Quizás las tensiones del comportamiento arbitral desenfocaron un poco a los jugadores de Chile. El principal pecado que cometimos fue habernos sacado con esas decisiones y propició el 0-1", añadió. Para el técnico, las tarjetas rojas marcaron el trámite del partido: "Perdimos la focalización en el juego y lo que sabemos hacer".
El descontrol de la Roja, demostrado en reclamos y luego la expulsión de Medel, provocó la principal retrospección de Rei. "Producto de una provocación, que es una pena... Es algo que está hablado, trabajado. He hecho mucho énfasis en eso. A través de mi carrera me he caracterizado en mantener ese equilibrio y control mental ante todas las adversidades y decisiones. Trabajamos con los jugadores. Es una pena que hayamos caído en ese error de estar discutiendo", lamentó.
Luego del duelo perdido ante Perú, dijo que su equipo estaba pensando más en la final que en esa semifinal. Situación que le siguió dando vueltas al colombiano. "Esta instancia no la merecíamos. Quizás Chile cometió un pecado y fue ilusionarnos a todos, cuerpo técnico, medios y afición, por el fútbol que expuso. Eso nos hizo soñar con una final y no era fácil asimilar este juego, para ninguna de las dos selecciones".
"Entramos a esta Copa siendo los sextos de Sudamérica, porque no fuimos al Mundial. Quedamos en un cuarto lugar, que no corresponde a lo hecho en la cancha. Se brindó la Selección, se soñó con una posición mejor. Considero que, si se dio eso, fue por lo que expresó futbolísticamente el equipo. Por penetración, compromiso y mística", dijo Rueda, al tiempo que valoró la inclusión de jóvenes a la base que ha jugado los últimos torneos.
Rueda, además, criticó el manejo del juez del compromiso frente a la discusión de Messi y Medel. "Fue una situación normal, de una disputa y un duelo que se palabrean, se pechean y listo. Amarilla para los dos. Tengo un gran respeto por los árbitros, pero era una cuestión de manejo. Un buen arbitraje se distingue por terminar con los 22 hombres en cancha. Así son los primeros minutos en varios juegos de la Copa América".