“Sabe de fútbol, pero qué malo es”: figuras del Olympique de Marsella se ríen de las dudosas dotes futbolísticas de Sampaoli

Jorge Sampaoli se ha ganado el aprecio del Olympique de Marsella. Razones sobran. Basta remitirse a la actual tabla de posiciones de la Ligue 1 para entender por qué el ex seleccionador chileno goza de tan alta estimación en el club francés. Les Olympiens figuran en el segundo de la tabla de la competencia gala y solo son superados por el todo poderoso PSG, liderado por Lionel Messi y Neymar. La escuadra del casilendense juega bien y gana.

El estilo de Sampaoli también seduce. Sobre todo a sus jugadores, quienes lo conciben como un entrenador cercano, que se involucra con el plantel más allá de sus actividades profesionales, aunque en ello deja entrever los peculiares rasgos de su personalidad. “No le gusta perder, pero es gracioso”, expone, a modo de ejemplo, el defensa central William Saliba, una de las figuras del equipo, durante una emisión del programa Le Vestiaire, de la cadena RMC Sport 1.

Saliba lo llena de elogios. “Cuando llega el momento de entrenar es serio pero cuando termina el entrenamiento le gusta bromear. Bromea con todo el mundo. En el lado humano, es un muy buen entrenador también”, profundiza.

El defensor no es el único jugador que interviene en el programa ni tampoco el único que se refiere al casildense, siempre en un tono festivo. Pape Gueye, Amine Harit y Dimitri Payet se suman con entusiasmo a la conversación y aportan otros datos incluso más jocosos y significativos. “¡Pero es un tramposo! ¡Hace muchas trampas! No deberías jugar al tenis con él. Apesta y hace trampa”, acusa Harit.

Sin embargo, es Pape Gueye quien aporta el golpe de gracia. “Es el entrenador de fútbol más malo que he tenido. Hasta para pases cortos... Sabe de fútbol pero ¡qué malo es!”, revela, en alusión a las cuestionables dotes futbolísticas de quien llevó a la U a conquistar la Copa Sudamericana en 2011 y a Chile a conseguir su primera Copa América, en 2015.

Sampaoli llegó el año pasado al Olympique de Marsella, después de haber dirigido al Atlético Mineiro, en Brasil. Con el equipo galo suma un 63,7 por ciento de rendimiento, lo que explica, en gran medida, la valoración que genera en el club.