Marcelo Salas enfrentó una dicotomía. Ayer se cumplieron 22 años de su recordada actuación frente a Italia en el Mundial de Francia, cuando le anotó dos goles a la Azzurra. Sin embargo, la efeméride lo encuentra enfrentado con el plantel de Deportes Temuco, al que pasó a la ley de Protección del Empleo, una situación que ha derivado en las quejas en este medio de jugadores como Cristián Canio y Hugo Droguett.
“Quiero dejar bien claro que hay 18 clubes que están acogidos a la AFC. Lo de Canio, Hugo u otros jugadores es válido, porque todos peleamos por nuestros sueldos (...) La plata que nos llega del CDF alcanza a pagar el 60 por ciento del funcionamiento del club. Entiendo el malestar, pero hay que entender que estamos en una pandemia mundial. Algún periodista hace una pregunta capciosa y ellos caen. Canio no ha estado en ninguna reunión, y eso que es el capitán, y no está al tanto de los acuerdos que hemos llegado con Domínguez, con Cellerino”, dijo a Radio Agricultura.
El Matador no quiso entrar en polémica con los futbolistas que lo apuntan. Sus dardos fueron directos al Sifup tras acusarlos de desinformar a los jugadores: “Muchas veces no se informa. A veces los jugadores parten como caballos de carreras. He escuchado a varios jugadores hablar de la plata del CDF. Yo no gano un peso con el fútbol. Es al revés. Le entregamos todos el dinero del CDF, los bonos de Conmebol, para ir a paliar el porcentaje que les estamos quitando”.
El histórico futbolista no se guardó nada. En una segunda intervención volvió a repasar al sindicato de futbolistas: “El Sifup recibió un millón de dólares del CDF. ¿Y dónde está esa plata? Dijeron que iba a ir en ayuda de los jugadores (…) El sindicato va a la guerra en vez de buscar un acuerdo para beneficiar a todos. Se paró el fútbol porque según ellos era algo político, pero en seis meses jugamos dos partidos”, enfatiza.
Gamadiel García, el presidente del sindicato aludido, respondió de inmediato vía Twitter: “No sabe lo que pasa en su club y va a saber lo que hacemos nosotros”.
En conversación con La Tercera, García entrega su versión. “El millón de dólares está distribuido entre los 56 compañeros que se han retirado, en más de 800 jugadores que han hecho cursos gratis, que hay que pagárselos a quienes los dictan. El millón está bien invertido entre nuestros asociados”, dice. “Yo puedo aclarar dónde están los recursos, los entrega Turner. A mí me gustaría saber dónde están los recursos de las SA que reciben US$ 3,2 millones al mismo tiempo que nosotros y luego 90 millones mensuales, 13 cuotas. Y al primer mes que ocurre todo esto de la nueva ley, los mandan al seguro. Me gustaría hacer la pregunta de vuelta: ¿dónde están los recursos que él ha recibido? La plata del sindicato se la puedo mostrar. Si quiere, que se vaya a dar una vuelta. No sé si pueden hacer lo mismo”, cierra.